En las entrañas de las comunidades alfareras de México, donde el barro moldea historias de tradición y cultura, un movimiento silencioso está transformando vidas. En este escenario, las mujeres emergen como agentes de cambio, impulsando la inclusión y el empoderamiento a través de su participación en la producción de barro libre de plomo, un eslabón vital para la salud y el bienestar de las generaciones presentes y futuras.
Este fenómeno cobra fuerza gracias a iniciativas como el “Círculo de Mujeres Hechas de Barro” promovido por Pure Earth México, que traza una nueva ruta hacia la igualdad de género, alineada con el Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) sobre igualdad de género de la Agenda 2030 de las Naciones Unidas.
El barro, fuente ancestral de sustento y creatividad, se ha visto empañado por la presencia de plomo, un contaminante que afecta la salud y el desarrollo de las comunidades. Ante este desafío, nuestra organización ha liderado programas para capacitar a mujeres alfareras en técnicas de producción de barro libre de plomo, otorgándoles un papel protagónico en la preservación de la salud pública y el medio ambiente de sus familias, sus comunidades y de la población mexicana en su conjunto, altamente consumidora de alimentos y bebidas en ollas y tarros de barro vidriado.
El Círculo de Mujeres Hechas de Barro no solo brinda herramientas técnicas, sino que también crea un espacio de encuentro y colaboración donde las mujeres comparten saberes, fortalecen lazos comunitarios y se empoderan mutuamente. Este enfoque holístico no solo transforma la calidad del barro, sino también la calidad de vida de quienes lo moldean.
Hay mayor conciencia ambiental
Quienes han participado en este programa han aprendido a construir y emplear hornos tradicionales de alta temperatura y a usar esmaltes libres de plomo de acuerdo con el tipo de barro que existe en su comunidad, además, retomaron la tradición alfarera, innovaron sus creaciones y empezaron a generar consciencia y cohesión social en torno a la cultura del barro.
Los impactos de esta iniciativa trascienden lo tangible. En primer lugar, se observa un aumento en la conciencia ambiental y en la adopción de prácticas sostenibles dentro de las comunidades alfareras. Las mujeres, al asumir roles activos en la protección del medio ambiente, se convierten en agentes de cambio que inspiran a las generaciones futuras a cuidar y respetar su entorno.
Además, el Círculo de Mujeres fomenta la autonomía económica y la inclusión laboral de las mujeres alfareras. Al convertirse en promotoras del barro libre de plomo, no solo generan ingresos para sus familias, sino que también desafían los estereotipos de género arraigados en sus comunidades, demostrando que las mujeres son motoras de desarrollo y progreso.
Otro impacto significativo es el fortalecimiento del tejido social. El círculo de mujeres crea redes de apoyo y solidaridad que trascienden las fronteras de lo laboral, nutriendo relaciones basadas en el respeto, la colaboración y la equidad de género. Estas relaciones son fundamentales para el bienestar emocional y psicológico de las mujeres, quienes encuentran en la sororidad un espacio de contención y empoderamiento.
En última instancia, el Círculo de Mujeres Hechas de Barro en las comunidades alfareras de México demuestra el potencial transformador de la inclusión y el empoderamiento de las mujeres en la consecución de los ODS.
Al dar voz y visibilidad a las mujeres alfareras, se abre un camino hacia un futuro más justo, equitativo y sostenible para todas y todos y se garantiza la transmisión de conocimientos, tradición y cultura con innovación a los futuros alfareros de México.
Director de la Oficina de Pure Earth México.