Colaborador Invitado

La relevancia del desarrollo de las ‘power skills’ en México en el contexto del ‘nearshoring’

Para capitalizar el auge del ‘nearshoring’ es esencial que la fuerza laboral mexicana, y en especial, los mandos intermedios, desarrolle un conjunto de habilidades que trasciendan las meramente técnicas.

En 2023, México logró un hito significativo al convertirse en el principal socio comercial de Estados Unidos, superando a China y Canadá. Según datos del U.S. Census Bureau, México llevó a cabo más comercio con Estados Unidos que nunca antes, consolidando su posición en un entorno global cambiante, donde la práctica del nearshoring ha cobrado gran relevancia. Esta situación subraya la necesidad urgente de desarrollar “power skills”, que incluyen “soft skills”, “hard skills” y “metacompetencias”, para mantener y potenciar esta ventaja competitiva.

El nearshoring, o la reubicación de procesos productivos más cerca del mercado consumidor, ha beneficiado significativamente a México. Factores como la proximidad geográfica, la similitud en zonas horarias y los tratados comerciales han hecho de México un destino preferido para las empresas estadounidenses que buscan reducir costos y riesgos asociados a las largas cadenas de suministro.

El incremento en el comercio entre México y Estados Unidos en 2023 es un claro reflejo de esta tendencia. A pesar de una ligera disminución del 3.85 por ciento en el comercio total de Estados Unidos, la relación comercial entre ambos países se ha fortalecido, alcanzando un total de 5.1 trillones de dólares. Este contexto ofrece a México una oportunidad única para consolidarse como un socio indispensable, siempre que pueda responder a las demandas del mercado con una fuerza laboral adecuadamente capacitada.

Para capitalizar el auge del nearshoring es esencial que la fuerza laboral mexicana, y en especial, los mandos intermedios, desarrolle un conjunto de habilidades que trasciendan las meramente técnicas. Las “power skills”, una combinación de “soft skills”, “hard skills” y “metacompetencias”, se presentan como fundamentales en este nuevo escenario de alta competitividad y complejidad.

Las “soft skills” son habilidades interpersonales y sociales que facilitan la interacción efectiva y armoniosa con otros, al tiempo que se logran resultados consistentes con la estrategia empresarial. En el contexto actual, habilidades como el liderazgo, la comunicación efectiva, la colaboración mutua, el trabajo en equipo, la adaptabilidad y la empatía son esenciales. Estas competencias permiten a los trabajadores mexicanos integrarse de manera efectiva en equipos multinacionales y adaptarse rápidamente a cambios y nuevas tecnologías.

Las “hard skills” son habilidades técnicas y específicas necesarias para realizar tareas concretas. En un entorno industrial y tecnológico en constante evolución, es crucial que la fuerza laboral mexicana esté capacitada en áreas como la automatización, la robótica, la gestión de la cadena de suministro y la ciberseguridad. El desarrollo de estas habilidades garantiza que México pueda ofrecer servicios y productos de alta calidad que cumplan con los estándares internacionales.

Las metacompetencias son habilidades de un nivel mucho más profundo, que permiten a los individuos, desarrollar hábitos operativos positivos para dirigir mejor, aprender y adaptarse continuamente en entornos complejos y cambiantes, mientras mantienen valores éticos que permiten darle certeza a los juicios críticos y decisiones de los gerentes y mandos medios.

La posición de México como principal socio comercial de Estados Unidos en el contexto del nearshoring presenta una oportunidad histórica. Sin embargo, para aprovechar plenamente esta ventaja, es imperativo que los mandos medios en las organizaciones, quienes constituyen el verdadero accionar del movimiento empresarial en las empresas mexicanas, estén equipados con un conjunto integral de las “power skills”.

Estas habilidades no solo mejorarán la competitividad de México en el mercado global, sino que también contribuirán al desarrollo sostenible y al crecimiento económico del país.

A medida que las relaciones comerciales evolucionan y las demandas del mercado cambian, las “power skills” serán uno de los pilares sobre el cual México puede construir un futuro próspero y resiliente a través de los mandos intermedios de las organizaciones y empresas mexicanas. Aquellas empresas que lo logren, tendrán un lugar especial en la competitividad necesaria para afrontar este nuevo efecto logrado entre la economía más importante del mundo y nuestro país.

Director General de ICAMI Región Centro y líder en Innovación, Transformación, Crecimiento Empresarial y Evolución Exponencial, inspirando y obteniendo logros en el panorama de instituciones, empresas y organizaciones.

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