Director de Comunicación de Engie México.
En el escenario actual, donde la urgencia de la transición energética se entrelaza con el auge de la inteligencia artificial, surge una sinergia poderosa con el potencial de transformar y aportar a un mejor futuro. La IA, lejos de ser un mero espectador, se está posicionando como un acelerador clave en la búsqueda de un futuro energético sostenible.
Es por ello que hoy quiero explorar cinco formas en las que la IA está revolucionando la transición energética, desde la optimización de la generación de energía renovable hasta la gestión inteligente de la demanda. Descubriremos cómo esta tecnología emergente no sólo acelera el camino hacia un futuro más limpio y sostenible, sino que también encuentra en las energías renovables el sustento necesario para su propio crecimiento sostenible.
Acompáñenme en este recorrido para desentrañar el papel crucial de la IA en la construcción de un futuro energético más eficiente, inteligente y respetuoso con el medio ambiente.
- Optimización de la Generación de Energía Renovable: Con más datos disponibles, IA permite predecir con más precisión la generación de energía renovable. Incluso puede llegar a predecir la calidad de la producción de un panel específico en un parque solar. Esto mejora la integración de estas fuentes en la red eléctrica, minimizando el desperdicio de energía.
- Gestión Inteligente de la Demanda Energética: Los sistemas basados en IA pueden predecir y gestionar la demanda energética en función de patrones de consumo, ajustando automáticamente el suministro para equilibrar la oferta y la demanda. Esto reduce la necesidad de energía de fuentes no renovables.
- Mantenimiento Predictivo de Infraestructuras: Utilizando IA, las empresas energéticas pueden predecir fallos en equipos críticos y programar mantenimientos preventivos. Esto mejora la confiabilidad y eficiencia de las infraestructuras.
- Optimización de Redes Eléctricas Inteligentes (Smart Grids): La IA ayuda a gestionar de manera eficiente las redes eléctricas inteligentes, que integran múltiples fuentes de energía, incluidos los sistemas de almacenamiento. Estas redes permiten una distribución más efectiva de la energía y facilitan la integración de otros avances como los vehículos eléctricos.
- Crecimiento de renovables por mayor demanda energética de data centers Es el otro lado de la moneda: mientras más se esparcen las aplicaciones de IA en nuestra vida diaria, mayor capacidad de procesamiento de datos necesitan para funcionar.
Este procesamiento de datos ocurre en grandes data centers y requiere buenas cantidades de energía. Para crecer de forma sostenible, los nuevos data centers deben conectarse a energías renovables, de lo contrario el beneficio que da una aplicación de IA, puede traer un alto costo a nivel ambiental.
En definitiva, la inteligencia artificial se perfila como un aliado clave en la transición energética. Una herramienta que funciona para optimizar procesos, predecir resultados y gestionar recursos de manera eficiente y que está transformando la forma en que generamos, distribuimos y consumimos energía.
Estamos en el momento oportuno de aprovechar y abrazar esta revolución tecnológica y aprovechar todo su potencial para construir un futuro energético en el que la sostenibilidad y la innovación vayan de la mano.