Colaborador Invitado

La IA en la edición de imágenes: ventajas y retos para profesionales y aficionados

Las empresas deben adoptar prácticas transparentes y responsables, garantizando que la tecnología beneficie a la sociedad.

Cofundador y CEO de Photoroom.

En los últimos años, la inteligencia artificial (IA) ha transformado la forma en que interactuamos con la tecnología en muchos ámbitos. Entre 2020 y 2023, la adopción de IA por parte de las empresas latinoamericanas aumentó del 58% al 71%, según el estudio Explorando la IA como motor de cambio en la frontera digital latinoamericana, de NTT Data y MIT Technology Review.

La IA se está integrando en diversos procesos empresariales, incluso en la edición de imágenes, con resultados impresionantes. La automatización de tareas repetitivas y complejas, como la eliminación de fondos de las fotos, la corrección de colores y la aplicación de filtros, se traduce en una mayor eficiencia y calidad en las ediciones. Las herramientas de edición de imágenes con IA se hacen más accesibles a un público más amplio, democratizando el acceso a técnicas de edición avanzadas.

Además, permite nuevas formas de creatividad, ofreciendo funciones como la generación de fondos realistas, la mejora automática de imágenes y la creación de efectos especiales que serían difíciles de realizar manualmente. La automatización de estos procesos también puede reducir significativamente los costes operativos, haciendo que la edición de imágenes resulte más económica tanto para profesionales como para aficionados. Esto es especialmente relevante en marketing digital y redes sociales, donde las imágenes impactantes son cruciales.

La aplicación de la IA en la edición fotográfica también aporta beneficios medioambientales, ya que la creación de fondos digitales ahorra recursos naturales y reduce las emisiones de CO2. Un estudio publicado en la revista Nature en febrero de 2024, reveló que la creación de imágenes con IA emite entre mucho veces menos dióxido de carbono en comparación con las fotos tradicionales. Sin embargo, es importante reconocer que el sector de la inteligencia artificial en su conjunto exige cada vez más del abastecimiento energético, lo que representa un equilibrio necesario para maximizar los beneficios medioambientales de esta tecnología.

En México, la disposición a adoptar nuevas tecnologías es evidente. El mercado de las aplicaciones de citas, por ejemplo, refleja esta tendencia. El Norton Cybersecurity Report 2024: Online Dating reveló que 66% de los usuarios mexicanos de apps de citas están interesados en utilizar IA para escribir frases hechas y 54% para mejorar sus fotos. Esta disposición a adoptar la IA en áreas tan personales como las citas en línea indica una apertura a explotar sus ventajas. Sin embargo, esto conlleva importantes cuestiones éticas y de seguridad que deben debatirse.

La IA ofrece numerosas ventajas, sobre todo para los empresarios en ciernes. Por ejemplo, en la edición fotográfica, la IA puede transformar imágenes corrientes en material profesional de alta calidad. Esto es especialmente útil para las pequeñas empresas con equipos reducidos, que así pueden conseguir resultados impresionantes para la comunicación de ventas y las redes sociales. Herramientas como Photoroom permiten a los emprendedores crear contenidos visuales impactantes y de aspecto profesional sin necesidad de contratar a un fotógrafo o diseñador gráfico, ahorrando tiempo y recursos.

Por otro lado, un uso excesivo de la IA puede conducir a la manipulación de imágenes con representaciones poco realistas y potencialmente engañosas, lo que afectaría a la autoestima de las personas y a su percepción de la belleza. También preocupa la privacidad, ya que muchas aplicaciones pueden recoger y almacenar datos personales de los usuarios, lo que las hace vulnerables a los ciberataques. La seguridad de estos datos debe ser una prioridad, y las empresas deben asegurarse de que protegen la información sensible de los usuarios.

Por lo tanto, es esencial que la IA se utilice con cautela y ética. Las empresas deben adoptar prácticas transparentes y responsables, garantizando que la tecnología beneficie a la sociedad en su conjunto. Esto incluye directrices claras sobre la edición de imágenes, una protección estricta de la privacidad de los usuarios y la consideración de las repercusiones socioeconómicas de la automatización.

La IA está dando forma al futuro de la edición de imágenes en América Latina, ofreciendo poderosas herramientas que transforman la experiencia del usuario. A medida que más empresas e individuos adoptan esta tecnología, podemos esperar continuas innovaciones y mejoras en nuestra sociedad.

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