Colaborador Invitado

No fue un meteorito, fue la incongruencia lo que extinguió a los dinosaurios

El respaldo de las mayorías a una reforma judicial no es casual. Es una respuesta a un poder que solo resuelve con sentencias menos del 5% de las denuncias de la ciudadanía.

En los últimos días, la oposición en todos sus rostros ha intentado desesperadamente instalar en la agenda nacional el término “sobre-representación”. Sin embargo, estos esfuerzos han sido en vano, pues sus palabras resuenan en un vacío, en mi opinión de siguen hablando a sí mismos, sin lograr conectar con la mayoría de la población.

Y no es para menos. La ciudadanía no olvida que son precisamente estos partidos y personajes quienes construyeron y se beneficiaron del sistema electoral mixto que hoy representa la ley vigente.

Por eso es que no es un meteorito lo que los está llevando a la extinción, sino su propia incongruencia.

Esos mismos actores que ahora exigen al INE y al Tribunal Electoral que violen la Constitución para interpretar la ley a su favor, son los que en su momento moldearon el sistema a su conveniencia. Hoy se lamentan de una supuesta “sobre-representación”, pero olvidan mencionar que a pesar de haber ganado apenas 43 distritos de los 300 en disputa, Acción Nacional, PRI, PRD y Movimiento Ciudadano obtendrán 92 curules en la Cámara de Diputados. Esta desproporción es la verdadera sobre-representación, y es precisamente esta incongruencia la que está llevando a estos partidos al borde de la extinción.

Por otro lado, no podemos ignorar que MORENA y sus aliados cuentan con mayoría legislativa en 27 congresos locales, cuando solo se requieren 17 para modificar la Constitución.

La gente lo sabía y otorgó su respaldo a este proyecto. No hubo un solo mitin en el que nuestras candidatas y candidatos no hablaran del “Plan C”, que busca consolidar la mayoría en ambas cámaras y en los congresos locales para llevar a cabo reformas cruciales, como la judicial.

La gente no solo lo entendió, sino que lo apoyó con su voto y hoy es un mandato popular.

El respaldo de las mayorías a una reforma judicial no es casual. Es una respuesta a un poder que solo resuelve con sentencias menos del 5% de las denuncias de la ciudadanía. Mientras la oposición sigue anclada en su propio discurso vacío, el proyecto de transformación avanza con el mandato popular.

La oposición, atrapada en su propio laberinto de contradicciones, no ha entendido que no es un cataclismo externo lo que amenaza su existencia, sino su propia incapacidad para adaptarse a la voluntad del pueblo. Los dinosaurios, corren el riesgo de desaparecer, no por fuerzas externas, sino por su propia inercia, falta de honestidad y  visión.

COLUMNAS ANTERIORES

La depreciación secular del peso
Gas natural: ¿Protagonista de la transición energética?

Las expresiones aquí vertidas son responsabilidad de quien firma esta columna de opinión y no necesariamente reflejan la postura editorial de El Financiero.