“No he recibido ninguna llamada del secretario de Gobernación hasta la fecha; ya le dieron una instrucción y no la ha recibido”, así se quejó ayer el panista Santiago Creel, al deslizar en los pasillos de San Lázaro que, a una semana de pedir audiencia con el Presidente, misma que fue turnada a Bucareli, no le han hecho caso, pero reveló: “No voy a anunciar con quién, ni cuándo ni dónde, pero ya un integrante del gabinete me dio una audiencia, finalmente, y voy a acudir a esa audiencia. Y depende de lo que el interlocutor decida, ya veremos si se hace público o no, que no nos gane el protagonismo”, indicó. “¿Más? Ya lo logró, ya está en los medios”, reviró el líder morenista, Ignacio Mier.
Gobernadores ¿opositores?
En el informe no oficial de la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, en el Auditorio Nacional, llamó la atención la presencia de góbers de la oposición, como los de Guanajuato, Diego Sinhue Rodríguez; Nuevo León, Samuel García; Durango, Esteban Villegas, y, sobre todo, el del Estado de México, Alfredo del Mazo, quien mereció una mención especial. La corcholata preferida de Palacio Nacional, quien repartió besos, abrazos y selfies, destacó “la gran colaboración” con el mexiquense: “Me atrevo a afirmar que este ha sido el mejor momento de coordinación metropolitana”, dijo en el acto en el que también estuvo Delfina Gómez, quien será la candidata de Morena en el Edomex ¿Será que el gobernador ya está preparando el camino para obtener una embajada? Es pregunta.
‘No me ayudes, compadre’
Y hablando del acto de campa… perdón, del informe no oficial de Claudia Sheinbaum, bien aplica el dicho de “No me ayudes, compadre”, o hasta el de “Con esos amigos, para qué quieres enemigos”. Resulta que quien ya se decantó por la corcholata-jefa de Gobierno es nada menos que el “zar anti-Covid”, el infalible doctor Hugo López-Gatell. “Yo creo que México está definitivamente muy preparado para tener una Presidenta mujer”, dijo el funcionario. Por el bien de la suspirante, esperemos que las predicciones electorales del subsecretario no sean como sus pronósticos en el manejo de la pandemia.
Hay de dos sopas
Activistas y periodistas alertan que el Ejército podría estar actuando a espaldas del Presidente o, en su defecto, el mismo López Obrador habría ordenado que se espíe a civiles. Cualquiera de los dos escenarios es grave: uno demuestra la falta de control que podría tener sobre las Fuerzas Armadas y el otro lo lejos que puede llegar el mandatario para controlar a sus opositores. Esa es una respuesta que solamente el Presidente puede dar.
Atenta recomendación
Ante el nombramiento de cuatro días de Manelich Castilla Cravioto como secretario de Seguridad en Quintana Roo, el presidente López Obrador afirmó que desconocía la situación. Sin embargo, destacó que la recomendación para los gobernadores entrantes es que tengan “buenos secretarios y fiscales”. Y es que el frustrado funcionario se trata nada menos que del excomisionado de la Policía Federal, esa que “se echó a perder” y que el mandatario no puede ver ni en pintura.
De apodos y mascotas
Vaya mal tino que tuvo la Secretaría de la Defensa Nacional en encontrar seudónimo para el presidente López Obrador, pues, de acuerdo con el hackeo hecho por la organización Guacamaya, al mandatario lo denominan Zeus, mismo nombre que lleva uno de los felinos de Palacio Nacional, de acuerdo con el catálogo de mininos que tiene la Secretaría de Hacienda, responsable de su cuidado.