En entrevista con los medios tras su encuentro con senadores, Lorenzo Córdova ofreció “decirlo despacito para ver si me doy a entender” y atajar de una vez por todas las voces que lo andan candidateando hacia 2024, pues hasta un fotomontaje de él con la banda presidencial anduvo circulando ayer en las redes. “Ni quiero ni debo ni puedo”, explicó pausada y contundentemente el consejero presidente del INE ante la insistencia de los medios. Y ya como cereza del pastel, Córdova remachó que él siempre ha respetado la Constitución y hasta soltó un “no somos iguales”.
Proselitismo en día hábil
Tras el choque en la Línea 3 del Metro, que acabó con la vida de una joven mientras ella andaba en Michoacán, Claudia Sheinbaum aún no se anima a retomar sus giras proselitistas por los estados, peeero… eso no le impide seguir corcholateando aquí en la capital. Ayer, la jefa de Gobierno impartió una conferencia en el seminario político Relevo Generacional. Organizado por Miguel Torruco Garza, el evento –en el que participaron cientos de integrantes de los Jóvenes para la Continuidad de la Cuarta Transformación– sirvió a la aspirante presidencial para evocar sus “luchas estudiantiles” y lo que ha hecho en su administración en materia educativa. Ahora sí que como dicen en Palacio: hablando en plata, fue pura campaña electoral.
Sigue la duda sobre presunto hermano de Caro
La polémica inició cuando las autoridades capitalinas confirmaron, el lunes pasado, la detención de Carlos Caro Quintero. El hombre de 61 años mostró su licencia de conducir con ese nombre y dijo ser hermano del capo Rafael Caro Quintero. Pero, a más de 96 horas de su detención, aún no se aclara el parentesco. Y es que familiares de Rafael dijeron a medios de Sonora que no conocen a Carlos. En cambio, la autoridad capitalina insiste en que no hay duda de que el nombre que dio el detenido es real. Sobre el parentesco, aseguran, no es tema del caso.
Acusan violencia política contra Margarita
Aunque entre los jefes de las bancadas en San Lázaro fumaron la aparente ‘pipa de la paz’, la sesión terminó ayer en un duro choque entre la 4T y el PAN. Los temas aterrizaron en los escándalos del caso García Luna. “Repito las palabras frente a la linda sonrisa de quien es la esposa del expresidente Felipe Calderón (Margarita Zavala, quien sonreía desde su curul y se quedó seria con una mueca): si no sabía, era un tonto, y si lo sabía, era cómplice”, reclamó la diputada Lilia Aguilar, del PT. Y la panista Paulina Rubio salió al quite: “Llamarle a una par ‘esposa de’ es violencia política en razón de género. Aquí no hay ‘esposas de’, que le quede claro”…
Hablar el mismo lenguaje
Pablo Gómez, titular de la UIF, participó por tercera vez en la mañanera y se le vio disfrutar la tribuna de Palacio Nacional, como en las anteriores ocasiones. Pero, incluso, el propio López Obrador celebró sus intervenciones, las palabras del exdiputado fueron como música para sus oídos, pues lo mismo habló de delincuentes de cuello blanco, de acciones antidemocráticas, de neoliberalismo y de los que considera excesos del INE. Tan es así que el mandatario le dio la anuencia de tomarse más tiempo para decir “lo que quieras”.
Lluvia de amparos… y nubes de humo
Siguen cayendo las suspensiones en contra de la ley antitabaco, con lo que algunos restaurantes pueden mantener sus zonas para fumar. Este jueves le tocó a la cantina El Gran León de Oro, que recibió este permiso por parte del juez Cuarto de Distrito en Materia Administrativa de la capital. Parece que los comensales capitalinos podrán seguir con sus cigarros en cada vez más establecimientos.