COMO AQUÍ SE consignó puntualmente, en mayo el embajador Ken Salazar fue un visitante frecuente de Palacio Nacional: llevó a una veintena de CEOs de empresas estadounidenses del sector energético.
Todas esas firmas de una u otra forma están afectadas por la política energética de la 4T, unas en franco pleito legal, y todas sin interlocución clara para solucionar sus problemas… hasta hace unos días.
Andrés Manuel López Obrador se mostró abierto y accesible a buscar acuerdos para mantener y atraer inversiones, con la condición de que los permisos y concesiones donde haya habido corrupción sean cancelados.
Por Palacio desfilaron Robert Edens de Fortress Energy, Jeff Martin de Sempra, Joe Gorder de Valero, Arturo Vivar de Monterra, Jeff Ramsey de Flint Hills Resources y Gabriel Yamal de EDP Renewables.
También Michael Polsky de Invenergy, John Cheney de Enera Power, Erik Stuebe de Ecoplexus, Alfie Bingham de Bulkmatic, Brian K. Partee de Marathon y Daniel K. Borgen de USD Partners.
Asimismo Douglas Shanda de México Pacific Limited y Timothy S. Duncan de Talos Energy, la cual por lo pronto llegó a un arreglo en principio para avanzar en el desarrollo del yacimiento de Zama.
López Obrador no solo está buscando nuevas inversiones ganando aliados estratégicos, sino sobre todo hilando fino para evitar los engorrosos arbitrajes internacionales que cuestan mucho a México.
A lo largo de la historia México ha enfrentado 21 arbitrajes, de los cuales solo se ganaron 11. Tan solo hoy en el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones, México tiene pendientes ocho reclamos presentados desde que inició esta administración.
Uno de ellos es por 100 millones de dólares contra Pemex, que lleva Octavio Romero, demanda de las empresas Finley Resources, MWS Management y Prize Permanent Holdings, por incumplimiento de contratos.
Y anterior a este sexenio está el de Oro Negro que le contamos y en donde Gonzalo Gil White y socios pretenden una indemnización de mil millones de dólares por la rescisión de contratos también de Pemex.
El ejemplo de que la cerrazón no lleva a nada es la CFE, que tiene en curso 21 arbitrajes internacionales en diferentes instancias, según sus estados financieros al cierre de 2021 y sin informar montos de reclamos.
Parte de los arbitrajes surgieron en 2021, por impago de suministro de gas, cuando se disparó el precio de éste, debido a la tormenta invernal que congeló los ductos en Texas.
Por esta vía legal contra CFE, tan solo el banco de inversiones Goldman Sachs exige el pago 400 millones de dólares y la empresa WhiteWater alrededor de 100 mdd.
Agregue también la condena al pago por 200 millones de dólares que le ordenó la Corte de Arbitraje Internacional de Londres en el caso de la fallida planta de Chicoasen II a Omega, CAABSA y Sinohydro en 2020.
Ahora, empresas europeas del sector energético esperan la misma oportunidad que sus similares estadounidenses de sentarse a dialogar con López Obrador y su gabinete.
LA NOVEDAD ES que Grupo Radio Centro, de Francisco Aguirre Gómez, finalmente acordó traspasar su concesión de televisión abierta en el Valle de México a El Heraldo, de Ángel Mieres. Desde hace varios meses el conocido radiodifusor buscaba comprador. Aquí le platicamos en su momento que ofreció el negocio a Grupo Imagen de Olegario Vázquez Aldir, Albavisión de Ángel El Fantasma González, MVS de Joaquín Vargas Guajardo y al mismo grupo de Mieres. El acuerdo se cerró precisamente ayer con El Heraldo, que a partir del próximo 13 de junio subirá al canal 8.1 todos sus contenidos informativos. Grupo Radio Centro moverá a un canal multiplexado, el 8.2, toda la parrilla de La Octava, la oferta de contenidos que se creó a partir de que Aguirre ganara la licitación de esta nueva concesión televisiva que organizó el gobierno de Enrique Peña Nieto. Esta transacción permitirá a Aguirre disponer de recursos frescos para avanzar en la reestructura financiera de su grupo radiofónico. Para Mieres la operación es un paso más en la consolidación de su multiplataforma de El Heraldo Media Group, con estaciones de radio, el impreso, el internet y la televisión.
LOS BERRONDO VIVEN una encrucijada por el desastre que dejó el director de Crédito Real, Carlos Ochoa, quien le reportaba al presidente del Consejo de Administración, Ángel Romanos. Esta situación orilló a que la familia dejará a la deriva a la Sofom y poco a poco cada integrante abandonara las responsabilidades que tenían al interior de la firma. Hasta las últimas semanas Romanos intentó arreglar la reestructura de la prestamista pero hubo un personaje que frenó sus intenciones. Se trata de Javier Nájera Muñoz, socio de Blink Capital Solutions, firma de asesoría financiera, estratégica y de valuación a empresas multisectoriales. Éste se dedicó a hablar con consejeros, accionistas, bonistas y subsidiarias de Crédito Real, con el objetivo de boicotear los acuerdos que Romanos encaminó. Las autoridades hacendarias y bancarias no entienden quién está detrás de este consultor, pues la insolvencia de la Sofom afecta a todo ese sector. No se descarta la posibilidad de investigar a Nájera, pues las cláusulas de confidencialidad en estos procesos son estrictas, máxime cuando la empresa estaba listada en la Bolsa Mexicana de Valores. Por lo pronto, la reestructura está en suspenso y ya se sabe por culpa de quién.
Y LA QUE se mueve a todo lo que da para evitar el golpe de lo que el mercado cree puede ser un riesgo sistémico en el rubro de las Sofomes es Unifin. Esta otra financiera que preside Rodrigo Lebois dio a conocer la semana pasada la contratación de una línea de crédito con Credit Suisse, que lleva aquí Nicolás Trillet, por un monto de 500 millones de dólares. Paralelamente, la compañía que en lo operativo conduce Sergio Camacho informó a la Bolsa Mexicana de Valores que finalizó exitosamente el acuerdo con los tenedores del bono por un monto de otros 200 millones de dólares con vencimiento en agosto de 2022 para extender su vigencia hasta mayo de 2024. Sin duda, dos noticias muy relevantes considerando el entorno tan complicado que se deriva de las situaciones que viven tanto Crédito Real, que preside Ángel Romanos, como Alpha Credit, que manejan al alimón Augusto Álvarez y José Luis Orozco.
HOY EL CENTRO Mexicano para la Filantropía y la Alianza por la Responsabilidad Social Empresarial reconocerán a 14 empresas de Grupo Salinas con el distintivo de Empresa Socialmente Responsable. Cobre del Mayo recibirá su distintivo por nueve años consecutivos; Italika por octavo año; Tiendas Elektra y Banco Azteca por sexta ocasión; TV Azteca y TotalPlay por quinta vez; la cuarta para Tiendas Neto, Grupo Dragón, UPAX, Totalsec, Promo Espacio y Typhoon; Agencia i lo recibirá por segunda ocasión y Dialogus por primera vez. El grupo de Ricardo Salinas se ha caracterizado por integrar negocios dinámicos, de rápido crecimiento, a la vanguardia tecnológica y sin distraer su filosofía, principios y valores de responsabilidad social, inclusión y sustentabilidad.