Coordenadas

La bendición papal y las movilizaciones de hoy

La visita al Papa pareciera ser un empate para ambas candidatas, así haya ido primero Xóchitl Gálvez. Aunque, de facto, favorece a Claudia Sheinbaum.

Aún no sabemos bien a bien cómo se fraguaron las reuniones que sostuvieron esta semana Xóchitl Gálvez y Claudia Sheinbaum con el Papa Francisco.

La candidata del Frente Opositor comentó que fue a través de un canal diferente a la Nunciatura Apostólica de México, un “contacto” que consiguió la audiencia, y por esa razón organizó su viaje a España en los días previos a su visita del martes pasado.

Sheinbaum dejó saber que la gestión de la audiencia llevó mucho tiempo y que no fue en respuesta a la visita que hizo su contrincante.

Mientras el Vaticano no revele los conductos y los tiempos que estuvieron detrás de las reuniones, todo será especulación, salvo las reuniones mismas.

¿Gestionó Gálvez su audiencia porque sabía que iba a ir Sheinbaum o la candidata de Morena orquestó rápidamente su visita porque tenía información de la audiencia que había sido otorgada a Gálvez?

En este momento ya es irrelevante la respuesta pues ninguna de la dos habrá podido obtener una ventaja notoria frente a su adversaria por tener su foto con el Papa.

Si la iniciativa fue de Gálvez y su equipo, buen punto para Artí. Si Sheinbaum tuvo una capacidad de respuesta tan rápida, también es de mérito.

En 12 días comenzarán formalmente los tres meses de campaña electoral… aunque la verdad es que ya llevamos muchos meses de campaña.

Las deficiencias de la regulación electoral en México permitieron que ambas candidatas hayan empezado su proselitismo, de facto, desde los primeros meses del año pasado.

Bueno, en realidad Sheinbaum, de manera soterrada, desde mucho tiempo antes. Pero Gálvez, desde su intento de ingresar en la conferencia mañanera, en junio del año pasado, casi no ha parado.

La visita al Papa, realizada en el llamado “periodo de intercampañas” es exactamente un acto de proselitismo en ambos casos, por más que quieran presentarlo como una visita personal.

¿Qué eventos tendrán una y otra como para mover la balanza y cambiar las inclinaciones que hoy existen?

No lo sabemos aún.

Como le hemos comentado, de acuerdo con la encuesta de El Financiero publicada el 29 de enero, el 65 por ciento de los ciudadanos dice ya tener decidido su voto.

Es decir, es inútil para las campañas de una y otra buscar a este grupo.

Si estuvieran bien diseñadas sus estrategias los excluirían.

Hay un 18 por ciento que ya tiene una inclinación, pero podría cambiar de opinión y otro 11 por ciento que está claramente indeciso.

Las campañas deberían orientarse a este 29 por ciento.

De acuerdo con la misma encuesta, el voto claramente comprometido con Claudia alcanza el 35 por ciento del total mientras que el que se identifica con Xóchitl es de 17 por ciento.

La estrategia de Claudia debería enfatizar la retención de la intención de voto de los que ya simpatizan con ella, y que le han dado una ventaja visible. Eso implica un formato de campaña más conservador, consolidando la maquinaria y concentrado en no cometer errores.

La estrategia de Xóchitl debiera ser diferente, y concentrarse en agregar a más y más ciudadanos que hoy tienen un cierto grado de indecisión.

La visita al Papa pareciera ser un empate así haya ido primero Xóchitl.

De hecho, el que ambas tengan su foto, de facto favorece a Claudia, por la ventaja que tiene.

La intención de Xóchitl de conseguir un punto a favor obteniendo una foto que quizás no iba a tener su contrincante, parece una jugada interesante que puede revelar que nuevamente hay iniciativa y creatividad en su equipo, así al final esa ventaja no se haya conseguido.

Veremos si las movilizaciones del día de hoy tienen la dimensión y naturaleza como para inclinar la balanza y darle a Xóchitl algunos puntos adicionales, o si saldrá a la calle solamente una parte del 17 por ciento que ya tiene decidido su voto por la candidata opositora.

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