Moneda en el Aire

Bancos aprendiendo de unicornios

Algunos unicornios logran millones de clientes en tiempo récord, lo que ha hecho que al menos un par de bancos mexicanos los volteen a ver.

Las fintech han cambiado y revolucionado el mundo financiero. Cada vez salen más unicornios que son casos de éxito a analizar y, sobre todo, a imitar en algunos aspectos, desde lo atractivo que resultan para los inversores y el porqué deciden inyectarles recursos, hasta la forma de operar ciertos productos.

En todo el mundo hay unicornios financieros que se han vuelto casos de estudio para otras fintech o empresas de tecnología interesadas en incursionar en ese mundo, pero hasta ahora el camino a seguir por las instituciones financieras tradicionales era si tenían el recurso de optar por comprarlas, o imitar algunos de sus procesos para ser más eficientes.

La competencia ha hecho que algunos unicornios tengan millones de clientes en tiempo récord, lo que ha significado que al menos un par de bancos mexicanos los volteen a ver ya de manera mucho más precisa.

Les cuento. Tras la salida el año pasado en la Bolsa de Valores en Nueva York de un unicornio brasileño, y la compra de bancos en América Latina por parte de otras fintech y la muy favorable aceptación que han tenido, eso hizo que algunos presidentes de bancos de capital 100 por ciento nacional y sus directivos fueran en estos meses a Nueva York en busca de respuestas.

Algunos reconocieron que fueron para preguntarle directamente a los analistas y corredores qué es lo que ven en estos unicornios, qué es lo que los hace diferentes, pero lo más importante es qué pueden hacer para ser vistos por los mercados de una mejor manera.

Llama la atención la sinceridad de buscar aprender en qué pueden mejorar y con ello poder ser más atractivos para los mercados, ya que al menos un par de esos bancos que son bastante exitosos, ahora se encuentran en el proceso de ver cómo adaptar las observaciones hechas y qué les puede funcionar a su tradicional modelo de negocio.

Por lo que, dado el tamaño de estas instituciones mexicanas, no descarten que en los próximos meses puedan presentar algunos cambios interesantes con lo cual buscarían cerrar un poco la brecha e incrementar la competencia con esta y otras empresas tecnológicas.

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Y en el otro lado de la moneda, el sector financiero se activa presencialmente. Primero la Convención Bancaria que, si bien no reunió a todos ya que hubo ausencias notables, si fue un arranque formal de las actividades en la industria; ahora tocó el turno a Prosa que realizó en Monterrey el tradicional foro para hablar de las tendencias del ecosistema de medios de pago.

Salvador Espinosa, director general de Prosa, presentó a William Garzón, senior enterprise architect at Google, quien confirmó lo que se ha visto en los últimos dos años, que las apps financieras crecieron 125 por ciento en un año, y ha ido cambiando la forma como manejamos el dinero.

Aunque lo más interesante es cómo se trabaja para fortalecer el ecosistema de pagos, ya que los datos estadísticos de Prosa muestran que en canales digitales el uso del débito se duplicó en dos años de pandemia, y esa tendencia continuará, lo que debe ser un llamado de atención a reforzar medidas de seguridad, uso correcto del plástico y productos y servicios acorde al uso de este medio de pago.

Y lo más importante, es que algunos emisores del país presentan un balance casi de 50/50 en tarjeta presente y tarjeta no presente, y no descartemos que esto se modifique de manera más rápida en los siguientes dos años, ya que los marketplaces como Amazon y Mercado Libre crecieron más de 160 por ciento. Lo cierto es que la revolución comenzó en los medios de pagos digitales. Por lo pronto, la moneda está en el aire.

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