Han sido, sin duda, años de cambios en todos sentidos, sucesiones familiares, compras de varios bancos, creación de un nuevo banco digital y próximo a ponerse en marcha, pero todo enfocado al final en crecer y posicionarse en México como el banco mexicano dentro de los más grandes, y todo eso ha pasado en Banorte a solo 124 años de que nació.
Para muchos quizás el nombre de Banorte está asociado a tiempos más recientes, pero lo cierto es que es muy interesante recordar que fue en noviembre de 1899 cuando se firmó el acta constitutiva de Banco Mercantil de Monterrey, en Monterrey, Nuevo León; así es, el origen como todos saben es del norte del país y en donde creció apoyando a las empresas regias que han crecido y convertido esa parte del país en una de las zonas más importantes de México.
Parte de la historia, es que en 1986 se dio la fusión entre Banco Mercantil de Monterrey y Banco Regional del Norte (fundado en 1947), dando lugar a Banco Mercantil del Norte, al que ya conocemos como Banorte y que a lo largo de los años ha ido fusionando poco a poco a otros bancos, recordemos al banco IXE que fue una institución con un enfoque especializado en atender a la clase media, o bien Interacciones más reciente, que tenía la especialidad de estados y municipios.
Lo cierto, es que hoy 124 años después de una larga lista de fusiones, en la que en los últimos 10 años ha tenido al frente a Marcos Ramírez, se enfoca en el siguiente reto que todo indica estará en marcha en 2024, y será el próximo banco Bineo, que estará dentro del grupo, pero enfocado a la atención digital.
Las pruebas de Bineo están en marcha, y quizá para muchos haya dudas sobre el tener una licencia bancaria adicional, teniendo ya un banco con renombre, pero tampoco son los únicos que han optado por este camino (también Santander tiene Open Bank que en 2024 se prevé igual esté en marcha), pero lo más interesante, es lo que se prevé puedan lograr con un banco digital nuevo, con clientes de otros segmentos, productos con otro nombre o no tan ‘clásicos’ como los que se conocen actualmente, lo cierto es que Bineo tendrá el foco de atención de todos.
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Y en el otro lado de la moneda, parece que fue ayer, pero ya son 30 años los que cumplió el trabajo que realizan en conjunto Elektra, Banco Azteca y Western Union en favor de las familias que reciben una remesa, ya que la alianza comercial ha servido para no solo recibir las transferencias en cualquiera de las tiendas y poder ahí mismo adquirir algún electrodoméstico, sino también para apertura de cuentas bancarias y entrar de esa forma al mundo financiero formal, una opción que se logra con el banco y como bien dijo Ricardo Salinas, presidente de Grupo Salinas, las remesas son un instrumento de profunda relevancia social y económica para los mexicanos y sus familias dentro y fuera del país y cada una de ellas representa una historia de sacrificio y arduo trabajo; sin duda, seguiremos viendo opciones para las familias mexicanas.
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Y otra moneda a seguir, es la guerra de tasas que han iniciado algunas de las principales fintech que han migrado a otra figuras reguladas, desde la Sofipo Nu que buscará ser banco en los próximos años, hasta Ualá, el banco recién adquirido que era antes ABC. De acuerdo con la Condusef, son varios los bancos y Sofipos que están en el proceso de ofrecer tasas con rendimientos no vistos, por ejemplo en planes de 28 días. Compartamos Banco ofrece tasas de 10.40 por ciento, Mifel 7.65 por ciento. Lo cierto es que la guerra de tasas por mejores rendimientos está en su mejor momento en el sector financiero entre Sofipos y bancos principalmente, Ahí hay que echar un ojo antes de decidir en dónde nuestro dinero rinde un mejor fruto. Por lo pronto, la moneda está en el aire.