Parteaguas

Los ojos brillantes de Bukele… y de Salinas Pliego

Salinas Pliego ya planea un negocio para que inmigrantes envíen dinero vía bitcoin a Banco Azteca en México. Eso cambiaría el negocio de las remesas.

Hasta ayer, un centenario valía 49 mil pesos, de acuerdo con indicadores de Banorte.

¿Aceptarían centenarios a cambio de su coche usado, en lugar de pesos? Es probable que sí. ¿Qué tal bitcoin? Ayer cotizó en el equivalente a 744 mil pesos.

El hecho de no entender cómo funciona la demanda y el respaldo de esta ‘moneda’ virtual provoca reticencia de algunos y por tanto dudas acerca de su verdadero valor. Eso cambió dramáticamente ayer cuando El Salvador lo aceptó como moneda alternativa de uso corriente en su país.

En lo esencial, un centenario es tan útil como un bitcoin. No sirven para mucho más que para guardarlos y venderlos cuando el dueño lo crea conveniente. Ambos son activos en tanto haya alguien dispuesto a comprarlos.

El primero lo compran en el banco; el segundo, en su smartphone a través de plataformas como Bitso, una empresa mexicana que opera como ‘casa de cambio’ de monedas digitales y que por cierto, ya vale el equivalente a más de mil millones de dólares, por lo que es considerada uno de los tres ‘unicornios’ mexicanos.

La diferencia hasta hoy entre El Salvador y en México es que allá ustedes o cualquiera pueden cambiar sus bitcoins por un carro o lo que quieran y por ley, el otro está obligado a recibirlos. La transacción estará protegida por el gobierno salvadoreño que, si le es requerido, entregará dólares a quien acepte el pago, garantizando el tipo de cambio al momento de la transacción. El fisco también los recibirá como pago de impuestos.

Si van a Twitter, verán que en su foto de perfil, Nayib Bukele, presidente de la nación centroamericana, aparece con una suerte de rayos o luminiscencia en sus ojos. En el ambiente de las redes sociales, ese detalle artificial representa el reconocimiento de su evangelización en torno al valor de las criptomonedas.

¿Ya vieron quién más aparece con ese detalle gráfico en la citada red social? El señor Ricardo Salinas Pliego, quien dijo que hizo un buen negocio con el bitcoin. https://www.youtube.com/watch?v=ICLpBPmLJko. Compró cuando estaba en 500 dólares y vendió cuando se ubicó en 17 mil dólares. Luego, cuando bajó de ese nivel, compró nuevamente. Hoy el bitcoin se ubica en 37 mil dólares.

En El Salvador, Bukele fue el promotor de la nueva legislación que fue aprobada por un Congreso que él controla. Pero suponer que este apoyo al bitcoin se trata solamente de una ocurrencia, podría ser riesgoso.

La estrategia contiene alicientes para que los convencidos del valor del blockchain –ese sistema incorruptible de bloques digitales conectados en el que se basa el bitcoin– se vayan a vivir a El Salvador y enriquezcan su economía.

Aquí va lo técnico. Para que operen las transacciones de compra y venta de criptomonedas, es necesario que dentro del sistema existan ‘mineros’ que las faciliten. Estos se encargan de generar una ‘huella digital’ a cada transacción, un número primo que requiere de muchos cálculos para cada una de éstas, que se generan a un ritmo de miles por segundo.

Muchas veces se trata de emprendedores que instalan servidores con ese propósito, pues como pago por su trabajo reciben justamente criptomonedas. Ellos ‘minan’ bitcoin.

Sus críticos se han volcado principalmente sobre el alto consumo de energía de sus sepercomputadoras y la contaminación inherente a esos procesos. Al final, la mayoría de la electricidad en el mundo es generada con la quema de carbón, petróleo o gas, cuya combustión deriva en el calentamiento del planeta.

Ayer, Bukele publicó en inglés un mensaje en Twitter que se traduce así: “Acabo de dar instrucciones al presidente de @LaGeoSV (nuestra empresa estatal de energía geotérmica), para poner en marcha un plan para ofrecer instalaciones para la minería de #Bitcoin con energía muy barata, 100 por ciento limpia, 100 por ciento renovable, 0 emisiones de nuestros volcanes”. Eso y ‘grandiosas’ playas, propiedades a la venta en el mar que no pagan impuestos y una residencia permanente inmediata para emprendedores de criptomonedas, deberían bastar para atraer inmigrantes con ese perfil.

Y respecto a Salinas Pliego, el magnate ya planea un negocio para que inmigrantes envíen dinero vía bitcoin a Banco Azteca en México. Eso cambiaría el negocio de remesas.

El autor es director general de Proyectos Especiales y Ediciones Regionales de El Financiero.

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