Si hubieran comprado mil pesos en bitcoin en noviembre, hoy podrían vender eso en apenas unos 700 pesos. En números redondos, habrían perdido un 30 por ciento en solo dos meses.
¿Deben invertir en criptomonedas este año? A la vista de estos datos, la respuesta parece fácil: no.
Pero quien tiene más experiencia invirtiendo en lo que sea, quizá considere la oportunidad que se abrió. Visto de otro modo, hay un descuento de 36 por ciento en el precio del bitcoin desde el récord de 67 mil 730 dólares (1.4 millones de pesos) que alcanzó el precio de este activo en noviembre. Hasta ayer, cotizaba en 43 mil dólares.
Es indispensable decir que hacer inversiones en criptoactivos conlleva el altísimo riesgo de perderlo todo.
Otra cosa necesaria es justamente indicar que lo que inició siendo un mercado de criptomonedas derivó ya en uno de criptoactivos.
La fama la recibió inicialmente el bitcoin por ‘presentarle’ al mundo el blockchain, el sistema que hace posible su funcionamiento.
Pero luego vino ethereum, un esquema montado en blockchain, pero que a diferencia del otro, permite registrar cosas vinculadas con cada ether.
Aquél que decida invertir puede hacerlo en el ‘sistema’ o en la cancha del juego, comprando ether, o bien puede comprar cosas. ¿Como cuáles? Como los NFT o ‘non fungible tokens’ que se popularizaron recientemente a partir de imágenes vinculadas con ether. Recuerden el club de yates de los monos aburridos (Bored Ape Yatch Club) https://boredapeyachtclub.com/#/.
No culpo a quien crea que es ilógico comprar una imagen digital única respaldada por Ethereum dentro de un sistema de intercambio llamado blockchain. La comprensión de una transacción así requiere de meses, muchos videos en Youtube y la lectura de suficientes textos al respecto.
Lo que puede decirse aquí es que el sistema saca del mapa a los bancos y a los gobiernos y que todo ocurre entre particulares en un modelo que hasta ahora demuestra total seguridad justamente porque la información está repartida entre todos los participantes, en lugar de que solo uno tenga prevalencia sobre el resto. Todo, en una cadena de bloques de información dependiente uno del otro.
Tanto el terreno del juego, como los NFT basados en esas reglas pueden ganar o perder valor. Ethereum ganó 2 mil 150 por ciento desde el inicio de la pandemia a la fecha. El Bored Ape #2087, que es un chango intangible pintado con motivos sicodélicos, está valorado individualmente en 538 mil dólares. ¿Cómo podrían usarlo? Conozco a un joven empresario mexicano que turna su colección de monos en su foto de perfil de WhatsApp.
La evolución del sistema provocó el nacimiento de un montón de ‘criptos’. Una de esas recibe la atención de equipos deportivos profesionales.
Es Chiliz, usada en el sitio www.socios.com para vender tokens de equipos deportivos de la NBA y varios de la primera división del futbol europeo. El campeón Atlas y el Santos de Torreón, en México, estrenarán esas ‘credenciales’ en forma de archivo digital. Muy probablemente este año, ustedes vean anuncios durante los partidos.
La opción de invertir en criptoactivos derivó de la inicial, concentrada en comprar monedas digitales a una que de a poco se acerca a la economía tradicional del intercambio de ‘bienes’.
Los promotores del blockchain prevén la llegada de intercambios de productos o propiedades físicas respaldadas en este sistema. Puede ser un elemento que genere valor en los criptoactivos.
De no ser el caso, la principal razón de un eventual incremento de valor podría seguir basada en la escasez y la seguridad conocida de éstos. Algo similar a la que respalda el valor del oro desde hace siglos, pese a su poca utilidad en la industria. Invertir es decisión de cada quien, el riesgo está tan presente como la oportunidad.