¿No hay oportunidades en México? El trabajo remoto está explotando. Hipotéticamente todos pueden emigrar… laboralmente, sin necesidad de salir del país.
Como el ascenso al Iztaccíhuatl, no es fácil, pero el camino está trazado para quien decida recorrerlo a cambio de salarios que empiezan en el equivalente a unos 30 mil pesos mensuales.
La pandemia se llevó muchas vidas, lamentablemente, pero también extinguió la necesidad de visas de trabajo para muchos. Creció otro tipo de ‘maquila’, la digital, que a diferencia de la que ofrecen las fábricas, puede entregar una buena calidad de vida.
Las empresas de California y del resto de Estados Unidos no se dan abasto, están contratando remotamente a quien pueda hacerlo… desde donde sea, me explicó la semana pasada Nate Singer, en una conferencia desde San Francisco.
Si alguien en México puede hacer el trabajo que tú ejerces y lo hace más barato, van a contratarlo en donde esté, advirtió el guardián de Mission Holdings, un fondo de capital que administra más de mil 500 millones de dólares invertidos en empresas tecnológicas.
Mauricio Moreno es cofundador de Dacodes, una empresa mexicana desarrolladora de software, enfocada recientemente en el staff augmentation que solicitan sus clientes extranjeros para complementar a su equipo interno con ciertas labores específicas.
“Vemos fuerte demanda en ingenieros de software senior, con 7 a 10 años de experiencia”, aclara. Los más requeridos hoy por esta compañía son los ingenieros de software con conocimiento de lenguaje React JS y Node JS de Javascript, fullstack, aquellos que pueden encargarse tanto del front end -la parte que el público ve y usa en su dispositivo- como de la que no ve y permite que todo funcione, el back end.
Moreno asegura que estos perfiles los contrata su compañía en modo home office, viviendo en México, para proyectos de empresas en Estados Unidos y ofrecen salarios mensuales de 50 mil a 150 mil pesos netos.
Requieren ciertas soft skills, habilidades blandas adicionales a las técnicas, principalmente relacionadas con una comunicación ágil: que participen en videollamadas de trabajo, colaboren con su equipo vía chats y correos electrónicos, sin retrasos ni complicaciones.
Que sepan escuchar y expresarse oralmente y por escrito, en inglés.
Pregunté en mi cuenta de Twitter sobre plazas remotas abiertas y varios respondieron con oportunidades expresadas con anglicismos adicionales: IT support, software developer, cloud computing…
Un caso es el de @DonChambitas, la cuenta de Hugo, un reclutador con una clientela 60 por ciento estadounidense para la que contrata gente que habita la Ciudad de México, Guadalajara, Aguascalientes, Colima, Michoacán y Mérida, a donde arriban muchos individuos con estas habilidades.
Georges Janin, un estadounidense de ascendencia francesa que vive en México, expuso recientemente en su cuenta de Twitter un caso atípico: la imagen de un departamento ubicado en la colonia Del Valle de la capital, que se anuncia amueblado y en renta con un letrero que exhibe la bandera de India y al calce la leyenda: “Furnished, Expats”, evidentemente dirigido a expatriados de ese país, que ya viven en México.
Eso evidencia la cantidad de expertos en software que desistieron de buscar una visa estadounidense y se quedaron en México porque desde aquí pueden trabajar para empresas de esa nación, me dijo Janin en una videoconferencia.
Su compañía llamada Gringojobs, busca a habitantes de México que cubran el perfil que requieren sus clientes: senior software engineer, con conocimientos de la tecnología Ruby on Rails; principal engineer en una startup de web3; o mid-level python developer, con tres años de experiencia. Todos, con salarios de 50 mil a 120 mil pesos mensuales.
¿Y para empezar desde cero? Para eso está Platzi o Coursera, que puede entrenar a la gente para trabajar en empresas como la consultora Globant y pueden ganar unos mil 500 dólares mensuales trabajando en el front end de algún proyecto.
Aparte, Amazon Web Services y Google, entre otras, lanzaron entrenamientos intensivos en línea llamados ‘bootcamp’, cuyos egresados pueden iniciar con labores de menor responsabilidad.
¿Pueden caer los salarios en Estados Unidos por esta causa? No en el corto plazo. La demanda de gente es enorme y sigue creciendo, me aseguran. Prometo seguir con el tema.