Amir Yaron, gobernador del Banco Central de Israel, informó que la economía de Israel avanzó 8.2 por ciento en 2021; previamente, durante 2020 se contrajo -2.2 por ciento, que fue una de las más bajas en el mundo. El sector de alta tecnología ha sido el principal factor que explica la evolución económica de Israel, que ha actuado “como una boya contra los desafíos presentados por el COVID”.
Yaron ha señalado que la posición de Israel tras la guerra de Ucrania es positiva porque tiene una fortaleza potencial para resistir la tendencia global hacia la inflación. La inflación está aumentando en el mundo, pero en Israel es actualmente de 3.5 por ciento, “solo un poco por encima del límite superior del Banco de Israel”. La inflación de Israel se ubica en 10.0 por ciento, inferior al promedio de la OCDE.
Yaron considera que el excedente de gas natural que tiene Israel en el presente “es una bendición potencial para su economía”, dada la tensión geopolítica que rodea al petróleo, empero, se deben tomar algunas medidas antes de que Israel pueda aprovechar plenamente los beneficios de su suministro. “Los lazos energéticos entre nuestra región son muy valiosos, todos tenemos que entender que para que Israel exporte, necesitamos licuar el gas; eso requerirá inversiones en Egipto, entre otras. Es muy importante para Israel tener más lazos con las naciones vecinas para trabajar duro en energía renovable”.
Yaron prevé que la tasa de interés aumente en abril; explicó que Israel fue uno de los primeros países en endurecer su política monetaria que fue muy expansionista durante la pandemia, la situación en la economía israelí está madura para proseguir con el alza de las tasas de interés.
Por otra parte, Yaron considera que Israel necesita invertir en el largo plazo, en educación, infraestructura y en la digitalización de la infraestructura en la periferia. En particular, la educación es clave para impulsar a grupos rezagados en su movilidad, entre otros el árabe y los ultraortodoxos para que se incorporen a la fuerza laboral.
Es de destacar que Yaron era profesor de Finanzas en la Escuela de Negocios Wharton de la Universidad de Pensilvania en noviembre de 2018, cuando el gabinete de Israel la aprobó como gobernador del Banco de Israel. Yaron es ciudadano israelí y estadounidense que vivió en EU en las pasadas dos décadas. Obtuvo su licenciatura en la Universidad de Tel-Aviv y su doctorado en la Universidad de Chicago, donde su asesor fue Lars Peter Hansen, ganador del Premio Nobel de Economía 2013. Asimismo, en octubre de 2019 recibió el reconocimiento bienal Premio Stephen A. Ross por la investigación sobre el cálculo de precios de activos a largo plazo, Ravi Bansal de la Universidad de Duke fue coautor de esta investigación.