Se cayó el caso Sterling y quedó evidenciada la descarada fabricación de delitos de la fiscalía de la CDMX de Ernestina Godoy, de la mano con Santiago Nieto.
¿Marcelo Ebrard creó un centro de espionaje en 2010 que fue coordinado por Ulises Lara para espiar opositores?
En este espacio he dado voz y visibilizado el caso de Nicolás Pineda, así como de otros imputados, perseguidos en el caso Sterling. Sheinbaum, Godoy, Nieto y demás inventaron que Miguel Ángel Mancera tenía un centro de espionaje. Fueron 14 los perseguidos a los que encarcelaron, los dejaron tres meses en aislamiento para quebrarlos y ofrecerles acusar a Mancera a cambio de salir; si no, pedirían 26 años de prisión y tendrían que pagar 40 mdp para cada uno. Ninguno aceptó esa bajeza tipo Emilio Lozoya: acusar sin pruebas para salvarse.
Nico asistió el 31 de enero a su audiencia vestido de beige, como cuando lo conocí en el Reclusorio Norte; no lo podía creer. Lo hizo con el Código Nacional de Procedimientos Penales bajo el brazo y decenas de documentos en mano, pues un juez federal había ordenado que se repitiera la audiencia donde fue vinculado a proceso hace 20 meses al determinar que en ella se violaron sus derechos humanos y que la actuación del juez de control devino ilegal. Y no sólo eso, también el juez federal le ordenó al juez Héctor Fernando Rojas Pacheco que le diera el uso de la voz a Nico, ya que en la audiencia donde injustamente lo mandó a prisión no le permitió el uso de la voz.
Nico, habrán de recordar, fue vinculado a proceso por las falsas acusaciones de Nieto y la Godoy, desde peculado y violación de comunicaciones privadas hasta el absurdo señalamiento de asistir a marchas… sí, así como lo están leyendo, por asistir a marchas, como si fuera un delito.
Nico, acompañado de su padre y un amigo, desmanteló una a una las acusaciones de la fiscalía, sin que le temblara la voz y con la dignidad que te da el tener la verdad.
Café con mucho piquete
A Nico lo acusaron de desviar fondos públicos, cuando en la carpeta había documentos oficiales que demostraban que él nunca manejó fondos públicos; lo acusaron de ser policía, cuando en la carpeta había evidencia de que él nunca ha laborado en ninguna institución de seguridad pública ni de procuración de justicia; lo acusaron de ser ingeniero en informática, cuando en el Registro Nacional de Profesionistas consta que nunca ha sido ingeniero en informática, y quedó al descubierto cómo el MP Irán Aquino Solís ordenó realizar intervención de comunicaciones ¡sin orden judicial!
Una de las revelaciones más impactantes fue cuando se analizó la supuesta existencia del centro de espionaje. La hipótesis de la fiscalía se desmoronó cuando las notas periodísticas que ellos tomaron como supuestas pruebas contradecían la versión oficial, pues resultó que el edificio albergó oficinas mucho antes de lo que la fiscalía relató al juez.
Agárrense
Pues de ser cierta la hipótesis del fiscal Irán Aquino Solís (que ahí estaba y jamás pudo alzar la cara o mirar a los ojos a Nico ni a ningún presente) –inhale y exhale–, significaría que el centro de espionaje de Márquez Sterling se habría creado en el año 2010, bajo las órdenes de Marcelo Ebrard y Alberto Esteva. Aún más revelador si, como asegura el MP Irán Aquino, esa área se creó ex profeso para albergar un centro de espionaje, resulta sorprendente que uno de los coordinadores de esa área fue, ni más ni menos, que ¡Ulises Lara López!, hoy fiscal encargado de despacho. ¡Quihúboles!
¿Una conspiración para espiar opositores que se gestó durante el sexenio de Marcelo Ebrard?
¿Una investigación de la fiscalía donde Ulises Lara fungió como espía de Claudia Sheinbaum?
Nico desmontó las acusaciones en su contra y expuso el fraude procesal en el que incurrió la fiscalía al no verificar información básica y al ocultar información que lo absolvía.
¿Con qué cara hablará la Godoy?
Lo más revelador fue la exhibición de la MP Thanya Waleska por fabricar, alterar y simular pruebas en contra de Nico. Él, con pruebas en mano, demostró cómo los fiscales María Luisa Gaddar Audry, Roberto Aguas Becerra, Irán Aquino Solís y Thanya Waleska Solís Tally manipularon y fabricaron datos para incriminarlo. La mentira de Thanya Waleska sobre una investigación federal que resultó inexistente fue el colmo de la falta de ética en la actuación de la MP y quedó exhibida como una vil prestanombres de Ernestina Godoy, capaz de atreverse a mentir ante la autoridad judicial aun cuando las audiencias quedan grabadas en video.
Otro fuerte
Pues el tiempo que Nico pasó tras las rejas, más de 450 días, se pudo haber evitado si el juez Héctor Fernando Rojas Pacheco (cc Rafa Guerra, Tribunal Justicia de la CDMX, SCJN, CJF) le hubiera permitido hablar en esa primera audiencia. Ahora ese juez intentó justificar su actuación anterior con el clásico usted disculpe, “yo no conocía la carpeta”, dijo durante la audiencia y, me imagino, sonrojado, pues traía tapabocas.
Ovación de pie
La petición de Nico al juez para denunciar formalmente a los fiscales por la fabricación de pruebas dejó al descubierto la desvergüenza con la que se manejó la justicia en este caso.
El juez, quien no dejaba de abrir los ojos y Aquino de querer meterse debajo del escritorio, le dijo: “Está haciendo acusaciones muy graves…”.
Pues yo le digo, señor juez, que su error ocasionó que un inocente estuviera preso 15 meses.
Al final, pregunté a Nico por qué si ya estaba en libertad acudió a la audiencia con su playera beige; su respuesta me dejó conmovida: porque no dejaba de sentirme preso hasta demostrar completamente mi inocencia y desenmascarar las mentiras de Godoy.
Ese miércoles 31 de enero Nico escuchó que no sería vinculado a proceso por ser inocente y porque las acusaciones en su contra no se podían sostener.
Hasta hoy.
De los 14 perseguidos en el caso Márquez Sterling van 6–0; así, la fiscalía de la CDMX va perdiendo, y gacho.
Sin embargo, las injusticias aún continúan
A Roberto Uribe, quien también demostró su inocencia y no fue vinculado a proceso por peculado e intervención de comunicaciones privadas, el juez Víctor Elías Pacheco Patlán le negó una audiencia para el cambio de su medida cautelar, porque, dijo, “la no vinculación a proceso no significa nada en cuanto a que hayan variado las condiciones que justifiquen su prisión preventiva”. ¡Háganme el favor! Por lo que siguen en el Reclusorio Norte.
Quien también sigue injustamente ahí y que les he documentado su inocencia es Gustavo Caballero.
Quien ya no está en el reclusorio es Arturo Zavala porque se quebró en la cárcel… sí, lo quebró la persecución de Ernestina Godoy y Santiago Nieto, dejando a un niño huérfano. ¿Cómo podrán dormir?
Ah, y las denuncias en contra de nieto crecen, eh, pues tanto Nico, como Roberto y Gustavo ya hicieron lo propio en el despacho del Fiscal de Hierro, Javier Coello Trejo.
Acaben con el teatro judicial de Godoy y Nieto,
Rafael Guerra, Tribunal de Justicia de la CDMX, SCJN, CJF.
Por no dejar
Y ya que hablo de Santiago, cómo dejar de comentar que el propio presidente AMLO, en la mañanera, reconoció que Nieto armó un montaje para perseguir políticamente a García Cabeza de Vaca. ¿Un clavo más a la tumba política de Santiago Nieto? Simétricamente, otra evidencia más de que García Cabeza de Vaca es inocente.