España e Inglaterra se van a enfrentar en su primera Final de la historia, por el título de la Euro 2024. Sus Ligas son las dos más importantes superpotencias globales y sus Selecciones son consecuencia de ello. Sin embargo, fueron construidas de forma diferente. ¿Cuál de los dos modelos es mejor?
Si bien en estos momentos la Premier League es considerado el mejor campeonato del mundo, LaLiga, en realidad, ha dominado en Europa, principalmente en la Champions, en la que los clubes españoles han alzado la Orejona en 10 de las últimas 20 ediciones, mientras los ingleses lo han hecho seis veces. Sin embargo, de esos 10 títulos, Real Madrid, con seis, y Barcelona, con cuatro, no dejan evidencia de que haya mucha paridad; mientras, los seis trofeos ingleses están repartidos en cuatro: Liverpool (2), Chelsea (2), Manchester United y Manchester City.
En España, en los últimos 20 años, solo hay tres campeones: Barcelona (11), Real Madrid (7) y Atlético (2); en Inglaterra se han coronado cinco: Manchester City (8), Chelsea (5), Manchester United (5), Liverpool y Leicester City.
Sin embargo, hay muchas cosas más que se pueden analizar.
España tiene un promedio de edad de 27 años y nueve de sus 26 seleccionados juegan fuera de LaLiga; Barcelona (4), Athletic (3), Real Sociedad (3) y Atlético de Madrid (3) son los clubes que más aportan elementos. Su principal figura ha sido Lamine Yamal, de solo 16 años, quien marcó uno de los dos goles con los que La Roja echó al que, en el papel, tenía el mejor plantel del torneo: Francia, aunque había jugado prácticamente a nada.
España tiene en el banquillo a Luis de la Fuente, quien reemplazó a Luis Enrique después del Mundial de Qatar. Con Luis se garantizó continuidad, pues ya estaba en la estructura de la RFEF en inferiores. El estilo de juego es el mismo de siempre, uno que se consolidó en las épocas de Luis Aragonés, cuando se concibió el tiqui-taka y el Sabio de Hortaleza consiguió la Euro 2008. Después de ese triunfo, con un futbol espectacular y efectivo, surgió el Barcelona de Josep Guardiola, quien, con estilo similar al que usaba Aragonés, aunque basado en el de Rinus Michels y Johan Cruyff, consiguió el primer triplete para un equipo español en la historia, en 2009. Vicente del Bosque, el reemplazo de Aragonés en La Roja, tomó lo mejor de su predecesor y, basado muchísimo en el estilo desarrollado por Guardiola, consiguió el Mundial 2010 y la Euro 2012. Desde entonces, España es una superpotencia mundial.
De Del Bosque a la fecha, el estilo ha sido el mismo, pese al bandazo con Julen Lopetegui -despedido tras anunciar su llegada al Real Madrid al finalizar el Mundial 2018 y se fue antes del torneo-; Fernando Hierro, director deportivo, asumió el cargo sin buenos resultados en el torneo. En ese mismo año, Luis Enrique tomó el mando y construyó una estructura deportiva que, 6 años después, aprovecha con mucho brillo De la Fuente: seis victorias en la actual Euro y el mejor futbol de todos.
En España desde hace más de 35 años, la forma de trabajar de casi todos los clubes es espectacular. De cara a los Olímpicos de Barcelona, todos se pusieron de acuerdo con las características técnicas que querían de sus jugadores, el parado táctico base y el desempeño de todos los futbolistas de acuerdo con su posición. Por eso es fácil encontrar que los contenciones, por ejemplo, tienen formas de juego similares, y podemos verlo en su momento con el propio Guardiola, luego con Busquets, Rodri y, antes, con otros futbolistas como Koke, del Atlético: recuperar la pelota no implica deshacerse de ella inmediatamente después. Todos se vuelven ‘metrónomos’ y marcan el ritmo del juego. También se sabe que los centrales tendrán capacidad de salir jugando, que los porteros deben tener buen juego de pies, que los volantes deben dominar el juego entrelíneas y que el centro a la ‘olla’ es el último recurso, no un estilo de juego. La Roja es, por eso, exquisita. Para el mundo, el estilo de esta Selección, el tiqui-taka, es tan claro como lo es el catenaccio de los italianos o el jogo bonito de los brasileños.
Mientras, la Premier League lo ha hecho todo bien. Construyó un proyecto rentable a partir de una muy precisa decisión al momento de circular los ingresos. No solo gastar dinero, sino revisar dónde se iba a invertir y qué se iba a hacer con las ganancias. Por eso, de pronto el ‘Big Four’ de hace 20 años con Manchester United, Liverpool, Arsenal y Chelsea, se convirtió en ‘Big Six’ al sumarse Manchester City y Tottenham, pero ya también vemos cómo reditúan las buenas inversiones en otros clubes como Aston Villa y Newcastle, que se clasificaron a Champions este año y el pasado, respectivamente.
Pusieron a los jugadores ingleses a competir por un sitio con los mejores del mundo. De pronto, empezaron a surgir de categorías inferiores verdaderos cracks que se consolidaron en miembros del Big Six, como Phil Foden, del City; Trent Alexander-Arnold, del Liverpool; Bukayo Saka, del Arsenal; Kobi Mainoo, del ManUnited; y está el caso de Cole Palmer, surgido de los Cityzens, pero consolidado este año en el Chelsea, y, claro, el capitán Harry Kane, canterano del Tottenham, aunque ahora figura del Bayern.
La media de edad en Los Tres Leones es de 26 años, pero su principal figura solo tiene 21, Jude Bellingham, y acaba de salir campeón de la Champions con el Real Madrid, como uno de los referentes, y es, junto al francés Kylian Mbappé, el jugador más caro del torneo con un valor de 180 millones de euros, según Transfermarkt. Kane y Bellingham son los únicos fuera de la Premier en el equipo, en dos de los mejores clubes de la historia; en realidad, el resto ya juega en la mejor Liga del mundo.
Sobre su entrenador, Gareth Southgate, no parece ser el indicado para el puesto. Pese al potentísimo plantel que tiene, no ha logrado hacerlo jugar al nivel que debería. Esta Inglaterra es rústica en planteamientos tácticos, opta mucho por el pelotazo y el ollazo; aunque es fina en la circulación de balón, tiene claros fallos al momento de construir cuando se cierran los espacios. Eso es, principalmente, responsabilidad del técnico.
Southgate fue un buen futbolista, disputó 57 partidos y dos Mundiales, aunque nunca estuvo en clubes grandes. Como estratega, solo tiene experiencia con el Middlesbrough, del que también fue jugador; durante esas tres temporadas y media que dirigió, descendió y luego fue despedido ya en la segunda categoría inglesa. Sin embargo, como De la Fuente, su llegada al equipo nacional tiene que ver con sus antecedentes en categorías menores, pues estuvo tres años en la Sub 21 antes de tomar a la mayor en 2016, después de la salida de Sam Allardyce, en medio de un escándalo de corrupción. Con Southgate, Inglaterra se ha convertido en un ‘ya merito’, pues cayó en Semifinales del Mundial 2018, perdió la Final de la pasada Euro y se quedó en Cuartos de Qatar 2022. De todos esos torneos, en el que menos futbol estético ha desplegado es este.
Finalmente, el valor total de Inglaterra es de 1.52 mil millones de euros, muchísimo más que los 965.5 millones de España. Sin embargo, el juego de ambos hace favorita a La Roja, que deberá lidiar con las mejores individualidades de los Tres Leones. Así pues, el partido es imperdible.