Tiro al blanco

Un mexicano en el Atlético Nacional: ‘¿Efraín qué..?’

Por el tamaño del equipo y por la nula experiencia como entrenador principal, es completamente natural que la afición sienta pánico por la llegada de Efraín Juárez.

“Pero también sabe hacer quesadillas?”, escribió en X, @ElChiruza. “Pregúntenle ¿cómo le quedan las aguas de Tamarindo que saben a Jamaica pero parecen de limón?”, posteó @andrescat217. @yeisoncanor dijo que: “Uno se imagina el diálogo entre Cardona y el amigo Efrain, orale Edwin no tengo chamba será que en Nacional necesitan algún entrenador para las inferiores?.......”. “Ya lo veremos en la 70 bajando tequila”, publicó @eldonat13n, mientras @greennacional fue más irónico: “Al menos se ve formal Botija y no nos va a tirar ningún cartel de Jalisco y de Juárez”. La conclusión del sentimiento en general de los aficionados al Atlético Nacional colombiano fue: “Una burla al hincha”, como afirmó @eljuA_Ncho.

Ayer fue presentado el mexicano Efraín Juárez como entrenador del equipo más grande y laureado de Colombia. El Atlético Nacional de Medellín tienen 17 títulos de Liga, uno más que Millonarios de Bogotá y dos más que América de Cali. Es uno de los dos equipos colombianos que han ganado la Copa Libertadores -junto a Once Caldas- y el único que la ha conquistado dos veces, la última en 2016 de la mano de Reinaldo Rueda, en la que venció en la Final al Independiente del Valle, equipo ecuatoriano comandado entonces por el argentino Pablo Repetto, precisamente quien fue destituido de los “Verdolagas” para que llegara Juárez.

El Atlético Nacional no es ningún juego, es un equipo enorme, uno al que se le exigen títulos. Por más que sea un país que Efraín desconoce futbolísticamente, ningún resultado que no sea levantar trofeos es aceptable para él o para cualquier entrenador que llegue al “Verde Paisa”.

A su llegada a la sede del club, el entrenador mexicano fue recibido primero por el capitán, el experimentado y mundialista David Ospina, quien llegó desde el Al Nassr saudí, donde fue compañero de Cristiano Ronaldo, pero antes pasó por Napoli, Arsenal y Niza. También recibió un cariñoso abrazo del legendario René Higuita, quien trabajará muy de cerca con él porque es el entrenador de porteros.

En el plantel del conjunto de Medellín hay, además, muchos conocidos del futbol mexicano, como Marino Hinestroza (ex Pachuca), Juan Zapata (ex Atlas), el uruguayo Pablo Ceppelini (ex Cruz Azul), Juan Felipe Aguirre (ex Celaya), Edwin Cardona -un jugadorazo, aunque un poco flojo, y quien fue su compañero en Rayados-, quien tuvo momentos brillantes en Monterrey y Pachuca, pero también pasó por Tijuana; también William Tesillo, figura en el León hasta el torneo pasado.

El “Verde” cuenta con una plantilla cuyo valor estimado es de 23.6 millones de dólares, su jugador más valioso es Alfredo Morelos, tasado en 4 millones, quien llegó desde el Santos de Brasil tras convertirse en ídolo del Rangers de Escocia bajo las órdenes de Steven Gerrard. Es el plantel más caro de la Liga BetPlay Dimayor.

Por el tamaño del equipo y por la nula experiencia como entrenador principal, es completamente natural que la afición sienta pánico por la llegada de Efraín, pero ahora aquí les cuento las cosas buenas del ex futbolista mexicano:

Luego de salir campeón Sub 17 con la generación dorada de 2005, el entonces lateral derecho debutó en sus amados Pumas de la UNAM, un equipo grande; su prometedor perfil le permitió ser fichado por el Celtic Glasgow, de Escocia, de nuevo, un equipo grande; después de su paso por el Zaragoza, donde tomó experiencia en LaLiga, uno de los campeonatos nacionales más importantes del mundo y en el que fue dirigido por Javier Aguirre, llegó al América, otra vez un equipo grande, y luego se fue al Monterrey, (aunque algunos lo cuestionen) otro equipo grande. Sus últimos pasos como futbolista los dio en el Vancouver Whitecaps, de la MLS, y el Valerenga noruego. En esos clubes ganó la Liga con Pumas, Celtic, América y la Copa MX con Monterrey. En Selección, Efraín jugó el Mundial de Sudáfrica 2010 y ganó las Copas Oro de 2009 y 2011.

En el verano de 2019 anunció su retiro en Noruega, donde conoció al entrenador que cambiaría su vida: Ronny Delia, quien se lo llevó al New York City FC, de la MLS, como auxiliar, en 2020; al año siguiente, salió campeón. Juárez siguió a Delia de regreso a Europa, a Bélgica, donde estuvo primero en el Standard de Lieja y, hasta marzo pasado, en el Brujas.

Como futbolista, salvo en el Zaragoza, Efraín siempre jugó en equipos con características ofensivas y con buen trato de balón. Aunque técnicamente era aceptable, su mayor virtud siempre fue su disciplina táctica y su lectura de juego. Pese a sus escasos 36 años, el mexicano ha picado piedra durante 5 años como segundo para que le llegara su oportunidad como máximo responsable. Además, es una persona preparada y elocuente, con facilidad de palabra y para expresar sus ideas.

En favor de Juárez como técnico con un perfil que puede acoplarse al Atlético Nacional: conoce y sabe lo que implica estar en equipos grandes e históricos, se acostumbró a ganar títulos -lo hizo en todos los clubes grandes en los que jugó-, con mentalidad de hierro; era un futbolista que actuaba en defensa, pero con características ofensivas, que contaba con un buen trato de balón, que gusta de la disciplina táctica, con formación europea y que tiene clarísimo que, pese a su edad, esta es una oportunidad de oro que no puede desperdiciar.

“Un tiro al aire colosal. Hasta no ser campeones ni apoyo ni confianza en este proyecto. Ojalá calle bocas con títulos, ojalá.”, escribió @JulianLetav. Aficionados al Nacional, esperen al resultado antes de juzgar.

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