Estamos en la recta final de los procesos de selección tanto de Morena como del Frente Amplio por México. Aunque con altibajos, en uno ya tenemos ganadora y en el otro lo sabremos pronto. Sin embargo, terminando esta etapa ambos cargan con una actitud principalmente negativa por parte de la audiencia sociodigital.
El de Morena tiene una percepción del 62 por ciento en contra. Mencionan que el proceso está definido desde el inicio para Claudia Sheinbaum, que realizaron actos anticipados de campaña, que se derrocharon millones de pesos, y le dan la razón a Marcelo Ebrard en que hubo miles de acarreados.
El 38 por ciento a favor menciona que a pesar de los incidentes en el proceso de encuestas, estas están avanzando y que es un proceso histórico en la medida en que no habrá -como lo dijo el Presidente- ‘dedazo’.
En el Frente Amplio por México, la negatividad es mayor: 68 por ciento frente a 32 por cidento. Los que están en contra mencionan que no se trató de un proceso transparente ni innovador, que así como señalan preferencias en Morena, en este estaba pactado desde el inicio que la candidata sería Xóchitl Gálvez y que consideran que al no dejar que Beatriz Paredes terminara la carrera, se desvirtuó el proceso y rompió el compromiso con la ciudadanía.
Los que están a favor, mencionan que es un ejercicio que va a permitir hacer contrapeso frente al que señalan como el verdadero enemigo de México: Morena.
Quién ganó reflectores en todo esto fue sin duda el presidente del PRI, Alito Moreno. Más de 16 millones de personas vieron un mensaje relacionado con sus declaraciones.
El 61 por ciento señalaron que el presidente del PRI solo se quiso aprovechar de la popularidad del Frente, que le dio la razón al presidente Andrés Manuel López Obrador sobre que en la oposición elegirían al candidato (a) por dedazo y que no fue correcto bajar a Beatriz Paredes por acuerdos internos.
Y ya pasando a la elección, las cosas regresaron a la normalidad en Morena. Claudia Sheinbaum se queda con el 36 por ciento de la conversación digital al llegar a 57.5 millones; Marcelo Ebrard con el 28 por ciento con casi 44 millones de personas alcanzadas, Adán Augusto el 24 por ciento con un aproximado de 39 millones y Ricardo Monreal con poco más de 18 millones que equivalen al 12 por ciento.
Claudia Shienbaum cierra con la actitud principalmente negativa, así ha sido a lo largo de las últimas semanas principalmente por deslindarse de la responsabilidad de los acontecimientos acaecidos durante su gobierno en la Ciudad de México, sus supuestos gastos de campaña y acarreos en eventos.
Marcelo Ebrard recibe críticas por su Pasaporte Violeta, por el apoyo de líderes sindicales y porque sus suspicacias no sólo desvirtúan el proceso sino que salpican al Presidente.
Adán Augusto también lo critican por excesos en los gastos de campaña, tener acarreados y por una supuesta relación con el presidente del PRI, Alito Moreno.
Finalmente Ricardo Monreal, aunque es el más positivo de los cuatro, los que están en contra señalan que sólo está ahí para que le den -como premio de consolación- la Ciudad de México.
Del lado del Frente ya solo nos quedó Xóchitl Gálvez con más de 63 millones de personas de alcance y una actitud positiva del 68 por ciento. La reunión con Enrique Alfaro y el apoyo del PRD le sumaron positivos, así como el resultado de las encuestas internas, donde ganó 57 por ciento a 43 por ciento frente a su contrincante.
Sin lugar a dudas hay que darle un reconocimiento a Beatriz Paredes. No solo llegó a competir al tú por tú frente a Xóchitl Gálvez, sino que sus discursos permearon en la opinión pública sociodigital. Nos quedamos con su frase “Soy una mujer de misiones, no de puestos”.
¿Y ahora?, pues a esperar el desenlace en el proceso de Morena y seguir lo que va a pasar en la otra etapa, como en un embarazo: nueve largos meses.