En Argentina y Turquía, los sueños con activos digitales están tomando forma.
No es sorprendente que un candidato que apoya BTC haya ganado recientemente una elección primaria en Argentina.
Justo antes de la volatilidad en los activos digitales la semana pasada y la caída de bitcoin (BTC) debido al aumento de las tasas de interés y a la baja liquidez en el mercado, Javier Milei se destacó en las noticias globales al ganar de manera inesperada las elecciones primarias argentinas.
Milei es un ferviente defensor de bitcoin, argumentando que también aboga por la eliminación del Banco Central del país. Aunque no es sorprendente que un candidato en un país conocido por la inflación (actualmente estimada en más del 100 por ciento anual) tenga una visión crítica del Banco Central, plantea cuestiones más amplias sobre la experiencia global de los poseedores de criptomonedas.
Cuando escuchamos que “Bitcoin es demasiado riesgoso”, debemos recordar que esta afirmación simple proviene de una posición de gran privilegio. El privilegio de algunos países que usan y disfrutan el uso del dólar en el comercio internacional, las finanzas y como moneda de reserva global.
Algunos de los beneficios de la ubicuidad global y la demanda prácticamente insaciable de dólares son la capacidad del gobierno de Estados Unidos de imprimir dólares con consecuencias mínimas y de endeudarse a tasas de interés más bajas que otros países, muchos de los cuales tienen historias financieras problemáticas (como Argentina).
El estatus de moneda de reserva global también simplifica las decisiones de política monetaria para Estados Unidos, ya que la Reserva Federal es efectivamente el banco central global, marcando el tono para que otros bancos centrales sigan políticas de tasas de interés similares para defender sus tipos de cambio.
Entonces, ¿cómo ha sido la experiencia de inversión en bitcoin para los poseedores globales fuera del sistema del dólar local? En los últimos cinco años, la mayoría de quienes tienen bitcoin fuera de Estados Unidos han visto un aumento sustancial en sus ganancias provenientes de esta criptomoneda, debido a la depreciación de sus monedas locales en relación con el dólar como consecuencia del aumento de las tasas de interés en Estados Unidos, además del retorno del 31 por ciento de bitcoin en comparación con el dólar.
Bitcoin en el período de cinco años ha sido más fuerte que un dólar más fuerte.
Los casos destacados en este período incluyen a Argentina y Turquía. Con una inflación realizada en cinco años del 60 por ciento en Argentina y del 33 por ciento en Turquía, los poseedores de BTC en Argentina y Turquía han podido preservar su poder adquisitivo y en su mayoría sobrellevar las condiciones políticas y económicas en sus países mediante el aprovechamiento de una reserva de valor descentralizada y digital.
En la arena financiera global, desafían el statu quo con bitcoin, convirtiendo sueños en realidad y mostrando que en tiempos turbulentos, esta criptomoneda se erige como un refugio de valor.
