Las y los comisionados del Inai hacen maletas. Tienen planeado irse a Turquía la semana que entra, en un viaje que incluirá a otros siete altos funcionarios de ese organismo y que tendría a las máximas autoridades de la transparencia fuera del país hasta 10 días. Nice.
En ese país se llevará a cabo, del 25 al 28 de octubre, la Asamblea Global de Privacidad 2022. Dos comisionados estarán en sendas mesas de las sesiones abiertas (hay dos días de sesiones cerradas), pero no hay información pública sobre qué harían los demás integrantes del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales que viajarán a ese foro.
De hecho, el domingo pasado el Inai emitió un comunicado sobre esa asamblea, pero los encargados de fomentar la transparencia omitieron, seguro por descuido, informar en ese boletín cuántos asistirán a ese congreso que cobraba entre 770 y 880 dólares la inscripción personal, dependiendo de la anticipación con que se confirmara la asistencia. A eso hay que agregar transporte, hospedaje y viáticos.
Tecnologías emergentes y privacidad es el tema de la asamblea 2022. Ahí se discutirán “las mejores prácticas para procurar la seguridad automática de la información personal en todos los sistemas informáticos y tecnologías, bajo la premisa de que deben incorporar en su desarrollo medidas de privacidad y no implementarlas como complemento”.
El Inai destacó que el encuentro, que tendrá lugar en Estambul, contará “con la participación de más de 140 autoridades de protección de datos personales y privacidad, de más de 70 países, que integran la GPA, el foro más importante a nivel global en la materia”. De ser así, prácticamente 10 por ciento de esas autoridades serían de México.
Andrés Manuel López Obrador ganó la Presidencia con un discurso que promovía, entre otras cosas, la austeridad. Sus recortes en diversos sectores de la administración pública han provocado parálisis (no pocas veces accidental, si tomamos en cuenta su aversión a órganos reguladores y autónomos en general). Pero también es cierto que la gente en México estaba harta de abusos como el turismo desde cargos públicos.
Flaco favor se hace el Inai con una delegación tan abultada como la que planea estar fuera de sus oficinas más de una semana. Sin duda el tema de la conferencia es relevante, y nadie pide caer en el provincianismo ese de que los viajes de trabajo al extranjero deben estar prohibidos o son totalmente inútiles, pero ¿de verdad tiene que ir una docena de funcionarios? Máxime cuando se puede asistir vía online: lo mismo y más barato.
Estambul, deben pensar en Insurgentes sur, bien vale un regaño presidencial. Ojalá les aproveche el viaje a comisionadas y comisionados (más colaboradores), pues en una de esas el Presidente los sigue mermando por la vía de no reemplazar a los que concluyan periodo: desde hace meses son cinco en lugar de siete, y en marzo se va otro más, con lo que el Inai podría volverse inoperante. Algo así como la receta que paraliza la Cofece.
La transparencia fue un logro de la alternancia. Hace 20 años México dio un paso gigante en ese renglón, uno que convirtió a nuestro país en referencia internacional, envidia, por ejemplo, de España en esta materia.
Mas en las batallas de muchas y muchos ciudadanos, que padecen a un gobierno federal refractario a la transparencia, se ha echado en falta un Inai protagónico. Y hasta han pecado de chambistas, al dar huesos a polémicos excomisionados. Ahora de remate bajan la cortina. Sólo resta desearles que lo disfruten.