Entre los analistas de mercados hay un renovado optimismo sobre un posible mayor crecimiento económico de México este año.
La más reciente encuesta de Citibanamex mostró una revisión al alza en las expectativas para el crecimiento de la economía mexicana en 2023 por quinta quincena consecutiva.
Cifras más alentadoras sobre la actividad económica en el segundo trimestre del año impulsaron las revisiones al alza.
De acuerdo con la estimación oportuna publicada la semana pasada por el INEGI, el PIB se incrementó 0.9 por ciento a tasa trimestral en el periodo abril-junio de 2023 y 3.6 por ciento a tasa anual.
Este dato significa que la economía nacional registró siete trimestres consecutivos de crecimiento positivo, algo no visto desde el lapso comprendido entre el tercer trimestre de 2013 y el tercero de 2015.
El dato de crecimiento trimestral, poco mejor de lo anticipado, abrió la puerta a nuevas revisiones al alza del mercado en cuanto al rumbo de la economía.
Esa es la razón por la que en la encuesta publicada este lunes por Citibanamex, el consenso estima el crecimiento en 2.7 por ciento, con lo que mejoró notoriamente desde 2.4 por ciento en la encuesta previa, la del 20 de julio.
El nuevo pronóstico de crecimiento es tres veces mayor al 0.9 por ciento que estimaron los analistas a principios de año.
Esta vez, 19 analistas de los 32 encuestados por Citibanamex hicieron revisiones al alza, destacando la de Vector de 2.3 a 3.4 por ciento y la de BX+ de 1.9 a 3 por ciento, entre una encuesta y otra.
BNP Paribas revisó al alza su pronóstico de crecimiento para México en 2023 de 2.5 a 3.5 por ciento, pasando a ser el banco extranjero con la perspectiva económica más optimista sobre el país, seguido de BofA, Barclays, JP Morgan y XP Investments, todos con 3.2 por ciento.
Rodolfo Navarrete, economista en jefe de Vector Empresas, explicó a este reportero que si la economía mexicana ya no creciera en el segundo semestre, es decir, si se mantuviera sobre el nivel del segundo trimestre en lo que resta del año, en el conjunto de 2023 crecería 3.0 por ciento.
A pesar de las sorpresas positivas en el PIB, “los indicadores que ya tenemos al cierre de julio, algunos indicadores de opinión, lo que muestran es que el crecimiento económico sigue fuerte, al menos en el inicio del segundo semestre”.
Diversos indicadores, agrega Navarrete, “nos están diciendo que julio ha sido al parecer un mes bastante positivo, de tal modo que la probabilidad de que siga creciendo la economía es relativamente alta”.
En otras palabras, dicho por quien esto escribe, la economía mexicana tiene ‘cuerda para rato’.
Nos faltan 10 millones
El lunes pasado también se publicaron los datos de asegurados en el IMSS al cierre de julio.
Al séptimo mes del año se tienen registrados 21 millones 885 mil puestos de trabajo permanentes y eventuales urbanos.
En julio se dieron de baja poco más de 2 mil plazas, lo que representa la primera pérdida para un séptimo mes desde 2020, el primer año de la pandemia.
Esta pérdida de empleos formales obedece a un factor cíclico asociado al periodo vacacional, según expertos laborales consultados.
Por cierto, la creación de empleo formal en los 56 meses que van del gobierno de López Obrador es de un millón 427 mil puestos de trabajo.
Esto representa un incremento de sólo 7.0 por ciento respecto al cierre de la administración de Peña Nieto.
Después del ajuste estacional de julio, se espera una recuperación importante de la ocupación en el sector formal para agosto.
De ser así, en septiembre se podría superar en el país la cifra histórica de 22 millones de empleos formales registrados ante el IMSS.
El reto es llegar a los más de 32 millones de mexicanos ocupados en la informalidad y que son laboralmente vulnerables.
La tasa de informalidad laboral en México se mantiene en torno a 55 por ciento, de acuerdo con cifras del INEGI.
Así que, aunque pronto se alcance la marca de 22 millones de trabajadores asegurados en el IMSS, el empleo formal seguirá muy rezagado frente a los niveles de informalidad.