CIUDAD DE MÉXICO. Con desacuerdos y sin los dictámenes de las principales reformas propuestas por el presidente Enrique Peña Nieto para hacer frente a la inseguridad y violencia en estados y municipios, y al combate a la corrupción y la impunidad, el Congreso de la Unión bajará la cortina este lunes y clausurará los trabajos de su periodo ordinario de sesiones.
Sin los acercamientos ni los avances necesarios, los senadores y los diputados tampoco tienen bases mínimas para proyectar un eventual periodo extraordinarios de sesiones en lo que resta de este año.
La Cámara de Senadores no ha logrado los consensos entre el PRI, PAN y PRD para dictaminar las reformas constitucionales que permitan el establecimiento del mando único policial en los estados y retirar esta facultad a los municipios, por ser considerado el primer y más fuerte vínculo del crimen organizado con los cuerpos policiacos.
APENAS PARA FISCAL DE FEPADE
Luego de varias semanas de desencuentros, la Cámara Alta tampoco logró consensuar la propuesta de ley del Ejecutivo que busca dar al gobierno federal la facultad de relevar a todo mando de gobierno municipal cuando "se tengan indicios" de que existe la penetración del crimen organizado en sus autoridades.
De igual forma, a los senadores no les alcanzaron los tiempos para acordar el nombramiento de un fiscal anticorrupción, como lo ordena la reforma constitucional que los propios legisladores aprobaron hace ya exactamente un año, cuando decidieron transformar la Procuraduría General de la República en Fiscalía General.
Confían en que, por lo menos, alcancen a designar al fiscal para delitos electorales, para que opere ya en el proceso electoral federal intermedio del año que viene, donde se renovará la Cámara de Diputados, nueve gubernaturas y diversos congresos locales, presidencias municipales y jefaturas delegacionales del Distrito Federal.
La Cámara de Diputados se contaminó con los desacuerdos del Senado y los escándalos de corrupción del primer círculo presidencial calentaron los ánimos entre PRI, PAN y PRD y rompieron toda posibilidad de acuerdos para conciliar una iniciativa común que configure el nuevo sistema nacional anticorrupción.
En San Lázaro los trabajos están suspendidos desde la semana pasada y los líderes parlamentarios declararon que no hay condiciones para dictaminar en estas últimas horas ni tampoco para pensar en un periodo extraordinario para esta semana.
LEYES ANTICORRUPCIÓN, EN LA MESA
Con ello se quedará en la mesa una de las más esperadas reformas para el combate a la corrupción en el ejercicio del gobierno, debido a que la oposición se quejó de que el PRI y el gobierno federal no aceptaron la creación de órganos ciudadanos autónomos y el fortalecimiento e independencia de entidades como la Auditoría Superior de la Federación y la Secretaría de la Función Pública.
"El coordinador del PAN en San Lázaro, José Trejo, apuntó que "es muy sencillo, si el presidente quiere sale, si el presidente no quiere no sale. El PAN no aceptará una ley a medias ni una simulación".
Miguel Alonso Raya, coordinador del PRD, lanzó el reto de que si el gobierno federal aclara su relación con el Grupo Higa, propiedad del empresario Juan Armando Hinojosa Cantú, y si hay disposición del secretario de Hacienda, Luis Videgaray, de que se investigue el proceso de compra venta de una casa, ubicada en el Club de Golf Malinalco, "puede ayudar a destrabar la construcción del sistema nacional anticorrupción".