CIUDAD DE MÉXICO. Con una decena de temas sin consenso en la mesa, la Cámara de Diputados y la Secretaría de Hacienda afinarán este fin de semana los acuerdos para cumplir con la ruta crítica diseñada, que contempla la aprobación de la Ley de Ingresos en el Pleno legislativo el próximo jueves 16 de octubre.
Los equipos operadores del PAN y PRD anticiparon que "hay acuerdos importantes", aunque aclararon que mantienen diferencias en "temas clave", que discutirán entre este viernes y hasta el lunes, en reuniones privadas, con los subsecretarios de Hacienda Fernando Aportela y Miguel Messmacher.
El plan de trabajo es sostener encuentros permanentes y a puerta cerrada hasta el lunes, entregar el dictamen el martes a los legisladores de la Comisión de Hacienda, votarlo el miércoles en la propia Comisión y el jueves pasarlo al Pleno de los 500 diputados para su discusión y votación.
Aunque los legisladores panistas Juan Bueno Torio y Rubén Camarillo Ortega revelaron que "ya hay un acuerdo avanzado del gobierno con el PRD", panistas, priistas y perredistas confirmaron que aún se encuentran en la mesa de definiciones los siguientes temas:
Establecer una nueva estimación a la alza del precio de barril de petróleo; moderar a la baja el déficit fiscal propuesto por el Ejecutivo; elevar paridad del dólar establecida; regular montos de endeudamiento; observar metas de crecimiento realistas; incluir en la ley los decretos presidenciales de apoyo fiscal; disminución del 30 al 28 por ciento el ISR; actualización de las cuotas del Impuesto Especial sobre Venta Final de Gasolinas y Diesel; revisión del Régimen de Incorporación Fiscal (RIF); revisión de informes sobre el impacto del incremento del IVA en fronteras.
El coordinador del equipo negociador del PRD, Fernando Cuéllar, aseguró que "se lograron ya avances importantes que nos acercan a un acuerdo", aunque el panista Rubén Camarillo lamentó que "los perredistas van por migajas", al estimar que buscarían una bolsa de 16 mil millones o cuando mucho de 30 mil millones, a pesar del riesgo de sobreestimar de 82 a 86 o hasta 90 el precio del barril de petróleo.
En respuesta, el perredista argumentó que "no son migajas, son recursos para proyectos con carácter federalizable, para atender necesidades de estados y municipios, de los que el PAN también quiere su parte".
Acusó que los panistas "se mantienen en su ruta electoral y en su estrategia de chantaje frente al gobierno federal, con una supuesta oposición a la reforma hacendaria, sólo para ganar recursos y responder a sus intereses empresariales".
El panista Rubén Camarillo dijo que a pesar de los acuerdos que hayan podido alcanzar el PRI y el gobierno, "nosotros vamos a insistir en los temas fiscales que planteamos para bajar las cargas fiscales a las Pymes, que son el 90 por ciento en el país y las que sostienen el empleo, los servicios".
Además, bajar el endeudamiento público, disminuir el gasto corriente, entre otros temas. Por ello remarcó que "aún no está concluida la negociación, no hay acuerdos terminados y vamos a vernos este fin de semana a puerta cerrada con los subsecretarios de Hacienda".
Tanto el PAN como el PRD también destacaron que, aunado al debate para elevar la estimación del precio del barril de petróleo, el otro tema que le sigue en importancia en la negociación es el establecimiento de la paridad del dólar en 13 pesos, al coincidir en que se debe elevar.
Bueno Torio indicó que hay desacuerdo en su grupo parlamentario con la estimación del tipo de cambio de 13 pesos por dólar, cuando en los últimos días, la cotización ha fluctuado entre los 13.40 o 13.50 pesos por esa divisa y se moverá todavía más, al bajar la plataforma de producción a 2.4 millones de barriles diarios porque habrá menos ingresos de los "petrodólares", que son los que finalmente impactan el tipo de cambio.
Respecto a la estimación del precio del petróleo, el legislador dijo que en los últimos cinco o seis años, el precio por barril de petróleo ha sido por encima de los 95 dólares en promedio, por lo que considero "absurda" la perspectiva del gobierno para el próximo año de fijar en 82 dólares el barril.
"Esto es generar un colchón de ingresos importante para el gobierno, que luego no sabemos cómo se gasta", dijo.
No obstante, su compañero de bancada Rubén Camarillo reveló que este tema aún será discutido al interior es su bancada, ya que varios legisladores consideran que no se debe elevar, dadas las condiciones de volatilidad de los precios internacionales que podrían poner en riesgo las finanzas públicas en su conjunto.