CIUDAD DE MÉXICO. El fundador del PRD, Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano presentó un diagnóstico descarnado de su partido, dijo que el sol azteca está más lejos que nunca del propósito original que le dio lugar, anticipó que soplan vientos de fractura, que de consumarse el perredismo seguirá achicándose.
Con la ausencia notoria de Andrés Manuel López Obrador, Cárdenas reconoció que en 2012 los perredistas tuvieron la más grande deserción de su historia, aunque no quiso abundar en el tema de Morena.
A su vez, Jesús Zambrano Grijalva también advirtió que el PRD tomará distancia de posiciones que se convierten en "dogmas de fé" que no tienen que ver con la lucha democrática. Planteó además una etapa de renovación y relanzamiento del PRD.
Al encabezar la ceremonia del partido que fundó hace 25 años, Cárdenas Solórzano planteó el escenario en el que se vería envuelto el PRD de concretarse la fractura frente al cambio de dirigencia del sol azteca: "Un partido en declive, en achicamiento, una perspectiva de voto reducido en 2015 y en 2018, con el riesgo de acercarnos a la condición de un partido que no sea útil a causa alguna y a nadie sea una persona o sea un colectivo", soltó.
Ante gobernadores, legisladores, líderes de corrientes perredistas y cientos de militantes que se reunieron en el Teatro de la Ciudad de México para conmemorar esta fecha, el político michoacano puntualizó que en estos momentos la lucha prioritaria de ese partido es por la defensa del petróleo.
Criticó que el sol azteca haya caído en la distorsionante práctica de tomar sus grandes decisiones por "cuotas" y por "pesos relativos".
Cárdenas Solórzano lamentó que hoy, a un cuarto de siglo de su fundación, el grueso de la ciudadanía vea al PRD "igual que a los demás partidos e igual que a los demás políticos".
Y enfatizó: "Al país de nada le sirve una izquierda dócil y dizque a la moda. Le sirve una izquierda fiel a sus principios, respetuosa a quienes piensan distinto, con ética y capaz de dar ejemplo en su vida interna de lo que quiera para el país".
El michoacano no dejó pasar la oportunidad para referirse al gran ausente, a Andrés Manuel López Obrador, y si llamarlo por su nombre reconoció que después de los comicios presidenciales de 2012, el PRD "sufrió la más grande deserción".
Y advirtió: "Todos con seguridad tenemos una explicación del porque de este hecho, pero este no es nuestro tema hoy, si lo es que nunca más vuelva a suceder hecho semejante", urgió.
Sin derrotismos
En su oportunidad, el presidente nacional del sol azteca, Jesús Zambrano Grijalva, emplazó a los perredistas a realizar una crítica constructiva y a analizar el rumbo que debe tomar el partido para los próximos años.
Subrayó que si bien ese instituto político ha reconocido errores y corregido estrategias, "se tiene que seguir en este ejercicio de revisión de nuestra actuación sin catastrofismos ni derrotismos que condenan al PRD a la inmovilidad política".
El político sonorense también convocó a iniciar una nueva etapa y "ser la principal fuerza política del país".
Incluso, advirtió al gobierno federal "no cantar victoria con la imposición de las reformas estructurales, porque las echaremos abajo".