¿Cuentas con el esquema completo de vacunación contra COVID-19 y trabajabas desde casa? Te tenemos una noticia: el regreso a las oficinas podría estar más cerca de lo que se vislumbra.
El Gobierno federal publicó este martes, en el Diario Oficial de la Federación (DOF) un acuerdo que ‘abre la puerta’ a ese retorno pues declara que las personas con el esquema completo de vacunación COVID no son consideradas como vulnerables.
“Las personas a quienes se haya administrado un esquema de vacunación contra el virus SARS-CoV-2 y habiendo transcurrido dos semanas posteriores a la aplicación de la última dosis, no serán consideradas dentro de la población en situación de vulnerabilidad para contraer dicha enfermedad grave de atención prioritaria”, se lee en el documento.
Pero, ¿quiénes eran consideradas personas vulnerables y en qué parámetros se les debe favorecer con el trabajo desde casa?
En mayo de 2020, se publicó un acuerdo por el que se establecen los Lineamientos Técnicos Específicos para la Reapertura de las Actividades Económicas.
Dicho documento remarcó que la población en situación de vulnerabilidad son aquellas propensas a desarrollar una complicación o morir por COVID-19. Esto incluye a mujeres embarazadas o lactando, personas con obesidad, personas adultas mayores de 60 años, personas que viven con diabetes e hipertensión descontroladas, VIH, cáncer, con discapacidades, trasplante, enfermedad hepática, pulmonar, así como trastornos neurológicos o del neurodesarrollo.
En ese sentido, a fin de dictar medidas extraordinarias para atender la emergencia sanitaria por causa de fuerza mayor, en marzo de 2020 se estableció el resguardo domiciliario corresponsable de manera estricta a toda persona mayor de 60 años de edad y en situación de vulnarabilidad independientemente de si su actividad laboral se considera esencial.
Los centros de trabajo fueron instruidos a implementar medidas para disminuir el riesgo de contagio entre la población en situación de vulnerabilidad.
Asimismo, se puso a consideración la suspensión o flexibilización de la asistencia a los centros de trabajo de personas en contacto o responsables del cuidado de menores de edad, personas adultas o en situación de vulnerabilidad.
Sin embargo, el acuerdo enfatizó que “en los centros de trabajo ubicados en localidades caracterizadas de alerta máxima, está prohibido que las personas en situación de vulnerabilidad acudan a trabajar”, es decir, en el color rojo.
La alerta máxima corresponde al color del semáforo epidemiológico, esto es un sistema de alerta sanitaria que se aplica a nivel regional y permite comunicar la magnitud de la transmisión del virus.
Con esto, en el nivel máximo, alto e intermedio se activarían los protocolos para que las personas vulnerables sean favorecidas con el trabajo desde casa, algo que puede cambiar con la nueva medida dictada por la Secretaría de Salud.