Hace unos días se detectaron los dos primeros casos de viruela del mono en nuestro país. El primero se atribuyó a un hombre que vive en Nueva York y viajó a México. El segundo y más reciente se dio en Puerto Vallarte, Jalisco.
Antes múltiples contagios en varios países del mundo y México, han comenzado a surgir ideas erróneas sobre el origen y el vínculo de la comunidad LGBT+.
Por ello, la Secretaría de Salud (SS) federal emitió un comunicado donde informa que la narrativa que asocia la enfermedad con hombres que tienen sexo con otros hombres alimenta el estigma y la discriminación, lo que conlleva a que quienes se han infectado se alejen de la atención médica oportuna y adecuada.
‘’Opiniones sin sustento científico, con una visión estigmatizante y discriminadora, impiden o pretenden limitar intervenciones en salud pública basadas en evidencia científica, y obstaculizan la investigación sobre el presente brote del virus que, de acuerdo con los datos publicados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), ya afecta a 29 países’', se advierte en el comunicado.
Las autoridades sanitarias recuerdan que la viruela del mono es causa por un ortopoxvirus, la primera enfermedad erradicada por el ser humano.
Se le llama coloquialmente del mono porque en 1958 fue detectada en estos animales; no obstante, también se puede encontrar en roedores.
En 1970 se detectó el primer caso en humanos y, desde entonces se han registrado brotes en una decena de países africanos. Fue hasta 2003 que se confirmaron casos fuera de este continente, ocasionando brotes de la enfermedad en diferentes años.
‘‘Es indispensable recalcar que atribuir la transmisión de este virus únicamente al contacto sexual es prematuro y alimenta estereotipos que vulneran los derechos humanos de las personas’', sentencias las autoridades sanitarias.
Y agrega que es imprescindible y muy necesario hacer hincapié en que el virus puede afectar a todas las personas sin distinción de su expresión sexual e identidad de género.