Las personas que dieron positivo a COVID-19 tienen un mayor riesgo de padecer trastornos neurodegenerativos como alzheimer, parkinson o hemorragias cerebrales, en comparación con las personas que dieron negativo al virus, según un nuevo estudio presentado en el 8.º Congreso de la Academia Europea de Neurología (EAN).
De las 919 mil 731 personas que se hicieron la prueba de COVID-19 en el estudio, realizado en Dinamarca, los investigadores encontraron que 43 mil 375 individuos que dieron positivo tenían un riesgo 3.5 veces mayor de ser diagnosticados con Alzheimer, 2.6 veces con la enfermedad de Parkinson, 2.7 veces con un accidente cerebrovascular isquémico y un riesgo 4.8 veces mayor con hemorragia intracerebral.
Aunque la neuroinflamación puede contribuir a un desarrollo acelerado de los trastornos neurodegenerativos, los autores destacaron las implicaciones del enfoque científico en las secuelas a largo plazo, después de padecer COVID-19.
El estudio analizó pacientes hospitalizados y ambulatorios daneses desde febrero de 2020 y hasta noviembre de 2021, así como personas con influenza del período previo a la pandemia, donde los investigadores utilizaron técnicas estadísticas para calcular el riesgo relativo.
“Más de dos años después del inicio de la pandemia de COVID-19, la naturaleza precisa y la evolución de los efectos de COVID-19 en los trastornos neurológicos permaneció sin caracterizar. Estudios previos han establecido una asociación con síndromes neurológicos, pero hasta el momento se desconoce si el COVID-19 también influye en la incidencia de enfermedades neurológicas específicas y si se diferencia de otras infecciones respiratorias”, comentó la doctora Pardis Zarifkar, autora principal del Departamento de Neurología, Rigshospitalet, en Copenhague.
No obstante, el riesgo de las diferentes enfermedades neurológicas no fue mayor en los pacientes con COVID-19 positivo que en las personas a las que se les había diagnosticado influenza u otras enfermedades respiratorias.
Los pacientes con COVID-19 sí tenían un riesgo 1.7 veces mayor de accidente cerebrovascular isquémico en comparación con los pacientes hospitalizados con influenza y neumonía bacteriana mayores de 80 años.
La frecuencia de otras enfermedades neurodegenerativas como la esclerosis múltiple, miastenia grave, el síndrome de Guillain-Barré y la narcolepsia no aumentó después de la COVID-19, la influenza o la neumonía.
“Encontramos apoyo para un mayor riesgo de ser diagnosticados con trastornos neurodegenerativos y cerebrovasculares en pacientes positivos para COVID-19 en comparación con pacientes negativos. Es tranquilizador que, aparte del accidente cerebrovascular isquémico, la mayoría de los trastornos neurológicos no parecen ser más frecuentes después de la COVID-19 que después de la influenza o la neumonía bacteriana adquirida en la comunidad”, agregó la doctora Zarifkar.
Finalmente, los investigadores señalaron que los hallazgos ayudarán a mejorar la comprensión de las secuelas y efectos a largo plazo de COVID-19 en el cuerpo.