La Candida auris es un hongo causante de infecciones graves del torrente sanguíneo, que pueden llegar a ocasionar la muerte del paciente.
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) emitió una alerta epidemiológica en 2021 motivada por el aumento de brotes de Candida auris asociados a la atención sanitaria en el contexto de la pandemia por la COVID-19.
La doctora Patricia Escandón, coordinadora del grupo de Microbiología de la Dirección de Investigación en Salud Pública y referente del laboratorio de Micología del Instituto Nacional de Salud (INS) de Colombia, explicó que este hongo es “causante de infecciones graves del torrente sanguíneo, que pueden llegar a ocasionar la muerte del paciente, en especial de aquellos que están críticamente comprometidos, tanto, que uno de cada tres pacientes con infección invasiva por C. auris puede morir”.
¿Qué es la Candida Auris?
La OPS lo define como un hongo emergente unicelular con características particulares, entre las que se encuentran su diseminación en los servicios de salud y en pacientes con sistemas inmunes debilitados.
El hongo tiene la capacidad para sobrevivir en superficies por largos periodos de tiempo.
De acuerdo con especialistas, una de sus principales características es su alto grado de resistencia a los medicamentos antifúngicos comúnmente utilizados para tratar otras especies del género Candida (polienos, azoles y equinocandinas).
¿Cómo se contagia la Candida Auris?
De acuerdo con los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de EU, la candida auris puede propagarse de un paciente a otro en entornos de atención médica como hospitales y hogares de ancianos.
Las personas se pueden infectar de diversas maneras: Al tocar superficies u objetos contaminados con el hongo o al tener contacto directo con una persona infectada.
Los brotes hallados se atribuyen a la propagación vía el contacto con pacientes infectados y superficies/instrumentos/equipo contaminados.
Es por ello que tomar precauciones especiales reducen la probabilidad de que el hongo se propague a otros pacientes. Estas precauciones incluyen:
- Ubicar al paciente en una habitación individual.
- Que los trabajadores de atención médica usen batas y guantes cuando atiendan al paciente.
- Buena higiene de las manos para los pacientes, familiares y trabajadores de atención médica.