La linfadenopatía es una afección que se ha detectado en algunas personas inoculadas con las vacunas Pfizer y Moderna contra COVID-19; sin embargo, también es un padecimiento que casi todos los niños tendrán en algún momento, de acuerdo con el Stanford Medicine Children’s Health, de San Francisco.
La linfadenopatía o adenopatía es una enfermedad en los ganglios linfáticos que se identifica con una inflamación o un aumento del tamaño de esos ganglios, de acuerdo con Redacción Médica.
El Stanford Medicine Children’s Health asegura que casi todos los niños tendrán linfadenopatía en algún momento, debido a que el agrandamiento de las glándulas ocurre a menudo en los casos de infecciones virales o bacterianas, como los resfriados, la gripe, o la faringitis estreptocócica.
¿Qué son los ganglios linfáticos?
Los ganglios son unas zonas de nuestro cuerpo en las que se almacena un tipo de glóbulo blanco denominado linfocito, encargado de defendernos frente a diversas enfermedades, fundamentalmente infecciosas y tumorales.
Además, suelen localizarse en grupos o regiones, siendo las regiones más habituales las ingles, las axilas, el cuello y la región submandibular (debajo de la mandíbula). También existen regiones de ganglios que están más profundas, como el mediastino (la zona situada entre ambos pulmones), los hilios pulmonares, el abdomen, etc.
Habitualmente, y debido a su pequeño tamaño, los ganglios no se suelen notar ni se pueden ver en radiografías. Sin embargo, cuando existe una inflamación de los ganglios por cualquier causa, éstos crecen y pueden tocarse debajo de la piel.
¿Cuáles son los síntomas de la linfadenopatía?
En los niños, es normal sentir algunos ganglios linfáticos en forma de bultos pequeños debajo de la piel, pero si estos se hacen más grandes de lo normal, el menor podría tener una infección u otro problema, señala la dependencia de salud.
Los siguientes síntomas pueden ser señal de una linfadenopatía:
- Bultos debajo de la mandíbula, a los lados o parte posterior del cuello o en las axilas, la ingle, el pecho o el abdomen acompañados de dolor y sensibilidad.
- Enrojecimiento o calor en el área.
Dependiendo de la causa, otros síntomas pueden incluir:
- Fiebre.
- Síntomas respiratorios como dolor de garganta, congestión y tos.
- Falta de apetito.
- Dolores en el cuerpo.
- Dolor de cabeza.
- Cansancio.