Salud

La pandemia olvidada: Primeras vacunas contra ébola llegan a Uganda

Desde septiembre de 2022, Uganda lidia con un nuevo brote de ébola en su país, que ha cobrado la vida de decenas de personas.

Actualmente, el cólera, el ébola, el COVID-19 y la viruela símica circulan por el mundo.

Uganda recibió el primer lote de vacunas para ensayos con la cepa Ébola-Sudan del virus hemorrágico que ha matado a 56 personas desde que se declaró un brote hace tres meses.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) envió mil 200 dosis de la primera de las tres vacunas candidatas para la enfermedad, dijo el jueves en Twitter el Ministerio de Salud con sede en Kampala.

El gobierno de Uganda dijo el 2 de diciembre que un último paciente que tenía fiebre hemorrágica fue dado de alta del hospital. Al menos 142 personas se infectaron en un brote que comenzó el 20 de septiembre. El gobierno espera que el país sea declarado libre del virus si no se registran nuevas infecciones para el 10 de enero, según el ministerio.

Uganda ha tenido múltiples brotes de ébola, incluido uno en 2000 que mató a más de 200 personas. El brote de ébola entre 2014-16 en África Occidental mató a más de 11 mil personas, la cifra más alta de víctimas por la enfermedad jamás registrada.

¿Qué es el Ébola?

La enfermedad por el virus del ébola es una enfermedad infecciosa grave que se propaga entre humanos por transmisión de persona a persona.

La infección se produce por contacto directo o indirecto con la sangre u otros líquidos o secreciones corporales (heces, orina, saliva, semen) de personas infectadas, solo cuando éstas presentan síntomas.


El virus del ébola no se transmite a través del aire. Aunque la enfermedad suele tener una letalidad alta, en el actual brote de Ébola la tasa se ubica entre el 55 por ciento y 60 por ciento.

Desde que se detectó por primera vez en 1976 en una aldea cercana al río ébola, en la República Democrática del Congo (antigua Zaire), los brotes de ébola se han registrado en distintas zonas de África.

Síntomas del ébola

El periodo de incubación (intervalo desde la infección hasta la aparición de los síntomas) oscila entre 2 y 21 días.

Las personas no son contagiosas hasta que aparecen los síntomas. La enfermedad se caracteriza por:

  • La aparición súbita de fiebre
  • Debilidad intensa y dolores musculares
  • Dolor de cabeza y de garganta
  • Vómito
  • Diarrea
  • Erupciones cutáneas
  • Disfunción renal y hepática

En algunos casos, hemorragias internas y externas. Los resultados de laboratorio muestran disminución del número de leucocitos y plaquetas, así como elevación de las enzimas hepáticas.

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