Ante la presencia de casos de la fiebre del valle, las autoridades de salud de Estados Unidos han alertado sobre esta infección causada por los hongos coccidioides.
De acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés), este tipo de hongos se presenta principalmente en Arizona y California, aunque también se conoce que vive en suelos de Nevada, Utah, Nuevo México, Texas, Washington, Sudamérica, Centroamérica y México.
¿Cómo se contagia la fiebre del valle?
La Clínica Mayo de Estados Unidos explica que la fiebre del valle puede producir signos como fiebre, tos y cansancio, y las personas se contagian porque las esporas de los hongos se mueven por el aire mediante cualquier alteración en el suelo, tales como actividades agrícolas, construcciones o el propio viento.
Las personas respiran los hongos y llevarlos a los pulmones, los casos leves de fiebre del valle por lo general sanan por sí solos, pero en los casos más graves es necesario el tratamiento antimicótico.
¿Cuáles son los síntomas de la fiebre del valle?
Los CDC señalan que en la mayoría de casos de quienes adquieren el hongo coccidioides nunca presentan síntomas, pero quienes sí llegan a tenerlos por más de una semana deben acudir al médico.
Los principales síntomas de la fiebre del valle son:
- Fatiga
- Tos
- Fiebre
- Falta de aire
- Dolor de cabeza
- Sudoración nocturna
- Dolores musculares
- Dolores en articulaciones
- Erupciones en la parte superior del cuerpo o en las piernas
La información de los CDC indica que los síntomas de la fiebre del valle duran de semanas a meses; sin embargo, en algunos pacientes los malestares llegan a extenderse más tiempo, principalmente si la infección empeora.
Asimismo, entre un 5 a 10 por ciento de quienes se enferman de la fiebre del valle llegan a presentar problemas pulmonares graves o a largo plazo. Mientras que en un uno por ciento, la infección llega a propagarse de los pulmones al cerebro, médula espinal, piel, huesos o articulaciones.
Medidas de prevención de la fiebre del valle
Si bien no existen vacunas para prevenir la fiebre del valle, se recomienda que si se visita o bien en alguna de las zonas mencionadas con presencia del hongo causante de la enfermedad se tomen en cuenta las siguientes recomendaciones, especialmente en verano, cuando la probabilidad de infección es más alta:
- Utilizar cubrebocas
- Evitar zonas polvorientas como las obras de construcción
- Permanecer en resguardo durante tormentas de polvo
- Humedecer la tierra antes de cavar en ella
- Mantener las puertas y ventanas bien cerradas
- Limpiar heridas con agua y jabón