La vacuna contra el COVID-19 de Janssen (Johnson & Johnson) ya no está disponible en Estados Unidos, después de que los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés) hayan solicitado la destrucción de todas las dosis aún sin administrar, que caducaron el domingo 7 de mayo.
En una nota publicada en su página web, los CDC recomiendan que las personas que hayan recibido una o dos dosis de la vacuna reciban un refuerzo bivalente de Moderna o Pfizer.
Según la cadena CNN, unos 19 millones de personas han recibido dosis de la vacuna de Janssen desde que salió al mercado en Estados Unidos.
El Gobierno puso a disposición de los estados más de 31 millones de dosis de ese suero, por lo que más de 12 millones han quedado sin usar.
Además, el año pasado los reguladores limitaron la cantidad de gente que podía acceder a la vacuna, estableciendo que solo aquellos que por motivos médicos no pudieran recibir dosis de otros fabricantes fueran vacunados con Janssen.
La semana pasada, la emergencia sanitaria aprobada por las autoridades estadounidenses para luchar contra la pandemia de COVID llegó a su fin, acabando con algunas de las medidas para facilitar el acceso a la sanidad que se aprobaron por el COVID.
El país acumula la mayor cifra de personas fallecidas por la enfermedad grave en el mundo: más de un millón de personas desde que comenzó la pandemia, a principios de 2020.
Durante la semana que terminó el pasado 6 de mayo (la última de la que hay registros) murieron 323 personas, según los CDC.
Luego de que se levantara la emergencia sanitaria por COVID-19, los CDC de Estados Unidos explicaron que las vacunas, los tratamientos y las pruebas de detencción seguirán estando disponibles en el país.
En EU, las autoridades tienen disponibles las vacunas antiCOVID de Moderna, Pfizer - BioNTech y Novavax para adolestentes y adultos, mientras que aplica Moderna y Pfizer - BioNTech para niñas y niños.