Si el narcotraficante Joaquín "El Chapo" Guzmán Loera fuera una marca, su escape y recaptura habrían marcado el inicio y final de una campaña de posicionamiento positivo que envidiaría cualquier compañía.
El líder del Cártel de Sinaloa fue mencionado entre junio de 2015 y marzo de 2016 en más de 2 millones de mensajes en línea, tanto en redes como Facebook, Twitter, YouTube e Instagram, como blogs, noticias y foros, de acuerdo con el estudio Chapo Guzmán, el 'zorro digital', presentado por Socialand,
En ese lapso, además de haber alcanzado a más de 51 millones de usuarios digitales, la percepción positiva de Guzmán Loera se disparó al pasar de un 2 por ciento en junio a un 47 por ciento en julio, cuando escapó del penal del Altiplano, y luego alcanzar un máximo de 65 por ciento entre octubre y noviembre, cuando presuntamente las autoridades estaban cerca de recapturarlo aunque sin éxito.
El secreto de tales resultados para convertir a un villano en un héroe para los mexicanos, según la agencia, está en cumplir con estos 6 puntos, de los que muchas compañías podrían aprender del fenómeno 'Chapo' en redes sociales:
Los mensajes al respecto del Chapo se difundieron en distintas plataformas, pues pulularon tanto en medios tradicionales como en digitales, lo que permitió mayor interacción al respecto del tema.
Las diversas plataformas en las que estuvo contada la historia del líder del Cártel de Sinaloa permitieron también que cambiara el tono de lo que se decía de él y pasara de ser un fenómeno informativo a una narración más emotiva y tuviera mayor vínculo con los internautas.
La participación de personajes famosos como Kate del Castillo y Sean Penn en el desarrollo de la historia permitieron que el mensaje aumentara su alcance entre los usuarios.
Las apariciones sucesivas de su esposa y parientes, como su supuesta hija y hasta su mamá en medios de comunicación permitieron dotar de calidad humana al capo sinaloense, quien pasó de ser un criminal a un hombre cualquiera, cercano a personas comunes y corrientes.
La aparición de una entrevista con Joaquín Guzmán Loera en una revista internacional como Rolling Stone inmediatamente tras su recaptura permitió que el tema retomara fuerza y cambiara de foco.
Aunque muchas empresas rechazarían ser asociadas con un narcotraficante, firmas como Barabas y Tequila Honor sacaron provecho de su relación con el jefe del Cártel de Sinaloa. Incluso, la fabricante de camisas reportó que el producto estaba agotado a los pocos días de reveladas las imágenes de la entrevista de Guzmán con Sean Penn.
De acuerdo con Federico Isuani, CEO de Socialand, esta estrategia puede ser aprovechada no sólo por compañías, sino también por otro tipo de organizaciones como asociaciones civiles e incluso partidos políticos.
"Si transformamos a un narcotraficante en un ídolo máximo, no es difícil pensar que un partido que hoy está visto como algo malo puede terminar siendo como el gran salvador", resaltó.
Sin embargo, la directora de proyectos especiales e inteligencia de la firma, Mónica Pérez, expuso que los usuarios de internet son muy volubles, por lo que hay que tener cuidado al intentar una estrategia por esta plataforma.
"Igual que podemos 'heroizar' a alguien, lo podemos condenar de la noche a la mañana, no hay una lealtad hacia la percepción", advirtió.