La adopción de coches eléctricos se disparará en los próximos años, con más de 100 millones de vehículos eléctricos de pasajeros en las carreteras en 2026 y más de 700 millones en 2040, frente a los 27 millones registrados a principios de este año, según el último informe anual Perspectivas del Vehículo Eléctrico a Largo Plazo (EVO) de la agencia de investigación BloombergNEF (BNEF).
La electrificación se está extendiendo rápidamente a todos los sectores del transporte terrestre, desde los bicitaxis hasta los camiones pesados, y también está repuntando en economías emergentes como India, Tailandia e Indonesia.
A medida que crece el impulso van tomando forma nuevas oportunidades económicas. El valor acumulado de las ventas de vehículos eléctricos en todos los segmentos alcanzará los 8.8 billones de dólares en 2030 y los 57 billones en 2050, según el escenario base de transición económica de BNEF, que supone la ausencia de nuevas políticas.
Los vehículos eléctricos y las baterías son ahora una parte central de la política industrial de muchos países y la competencia para atraer inversiones aumentará en los próximos años.
A pesar de los rápidos avances, es necesario que los políticos y los participantes de la industria tomen medidas urgentes para mantener el transporte por carretera en la senda de los objetivos de emisiones a largo plazo que se han fijado los países.
“La electrificación directa mediante baterías es la vía más eficiente, rentable y comercialmente disponible para descarbonizar completamente el transporte terrestre. Aun así, es necesario un mayor impulso en áreas como el transporte pesado, la infraestructura de recarga y el suministro de materias primas”, afirmó Aleksandra O’Donovan, responsable de vehículos eléctricos de BloombergNEF.
El informe incluye un escenario de emisiones netas cero, consistente en una flota mundial con cero emisiones a mediados de siglo. Sólo un segmento del transporte por carretera, el de los vehículos de tres ruedas, está totalmente encaminado hacia este escenario más ambicioso, pero los autobuses y los vehículos de dos ruedas también están muy cerca.
Las camionetas comerciales y los coches de pasajeros también están ganando impulso, pero necesitarán apoyo político adicional para mantenerse en el buen camino. Los camiones pesados están muy por detrás de la trayectoria de cero emisiones netas y deberían ser una prioridad para los legisladores.
Las inversiones en la red, las conexiones a la red y los procesos de concesión de permisos también deben racionalizarse para apoyar el gran número de puntos de recarga necesarios para la transición del transporte por carretera.
Puede consultar un resumen ejecutivo completo con las principales conclusiones y más información sobre las Perspectivas de los Vehículos Eléctricos a Largo Plazo en: https://about.bnef.com/electric-vehicle-outlook/