En los últimos dos años Bosch México ha acumulado inversiones por casi 25 mil millones de pesos, de los cuales 15 mil millones de pesos fueron destinados al desarrollo de tecnología en materia automotriz.
Este año, después de que su área de negocio enfocada a la Movilidad reportara un crecimiento a doble dígito en sus ventas durante 2023, decidió llevar a cabo una reconfiguración de ésta y otras divisiones.
En entrevista, Eduardo Watty, vicepresidente de Ventas de Soluciones de Movilidad de Bosch México aseguró que la empresa avanza su visión hacia el desarrollo de tecnología para la movilidad del futuro enfocada principalmente en tres puntos estratégicos: seguridad hacia cero accidentes; la conectividad y el tren motriz.
En cuanto a la seguridad, señaló que trabajaron junto con las instancias de gobierno para que dentro de NOM 094 quedara establecido que todos los sistemas de Control Electrónico de Estabilidad (ESP por sus siglas en inglés) parte del sistema ADAS (Advanced Driver Assistance Systems), fueran obligatorios a partir de este año y avanzar en el tema de cero accidentes.
Añadió que para la conectividad, el software va a tomar una gran relevancia en la transformación de la movilidad y la industria automotriz por lo que trabajan en el desarrollo de aplicaciones, pues prácticamente en poco tiempo tendremos vehículos que serán como un teléfono inteligente con ruedas.
“Esta es una nueva tendencia en la industria automotriz, el crecimiento es interesante ya que se desarrollan tres veces más aplicaciones o 10 veces más soluciones de software y en esa misma proporción se están creando, ya que México es un jugador que exporta a nivel global, pero también importa vehículos globales”.
Destacó que también trabajan en el desarrollo del hardware de unas supercomputadoras que tendrán la capacidad de interactuar e interconectarse con el vehículo, sus componentes, el usuario y con el entorno.
Respecto a las soluciones para tren motriz, Eduardo Watty indicó que trabajan en el desarrollo de nuevas generaciones de componentes para inyección directa y sistemas de postratamiento, así como en componentes para la generación de nuevos vehículos eléctricos.
“Toda esta tecnología entorno a la movilidad, Bosch la está produciendo en México, los componentes electrónicos en las plantas de Juárez y Celaya; los sistemas de frenado asistido y el ESP en Aguascalientes; los sistemas de inyección de combustible en San Luis Potosí y mientras en Toluca está produciendo actuadores y componentes para transmisiones”.
Así, en este año el Grupo Bosch pondrá en marcha 30 proyectos de producción de vehículos eléctricos. En el área de crecimiento del hidrógeno ha reafirmado sus expectativas de negocio: para 2030, sus ventas con tecnología de hidrógeno podrían alcanzar los 5,000 millones de euros.