La automatización de los procesos y actividades que normalmente suelen ser realizadas por personas, están a la orden del día, desde en la industria automotriz, el transporte, y ahora, incluso la atención al cliente es replicada por un robot. En Texas, esto es cada vez más común.
Si bien, no asumen el control por completo, los robots en restaurantes están presentes, en recepción, toma de órdenes y elaboración de alimentos; la facilidad de acceder a AI y robótica permite que las empresas brinden un servicio de manera más inteligente.
“Antes era emocionante ver un robot, pero ahora se ha convertido en la norma”, dijo Todd Peacock de Bear Robotics.
La empresa, con sede en Addison, ha colocado estratégicamente sus robots en muchas empresas del norte de Texas, a medida que los restauranteros batallan por falta de personal o quieren ser más eficientes al atender a sus clientes.
“Tenemos muchas bandejas diferentes al mismo tiempo, lo que ayuda a nuestros servidores y podemos reducir el número de empleados”, señala Jacob Park de Zzizim Plano.
Sin embargo, la integración de robots va más allá de los restaurantes. Incluso los asilos de ancianos del norte de Texas han encontrado una labor para ellos. Por ejemplo, en Harbor Chase of Plano Senior Living, los residentes encuentran esta tecnología todos los días durante el almuerzo y se han adaptado perfectamente a ello.
“Ayuda a los camareros a sacar la comida más rápido y a los residentes les encanta porque la comida sale mucho más estable”, explica Melissa Perkins, chef de Harbor Chase de Plano Senior Living.
Lo anterior demuestra que los robots en el área de servicio al cliente en general son cada vez más aceptados, y están revolucionando la manera en que se interactúa con los usuarios.
“Los robots están demostrando ser realmente útiles en la industria. No sólo restaurantes, sino también residencias para personas mayores. Será normal verlos en más y más lugares, y la gente está viendo los beneficios desde el lado del consumidor, pero también desde el lado comercial”, afirmó Pavo Real.
Este cambio apunta hacia un futuro en el que los robots podrían convertirse en una parte integral en el negocio del servicio.