La crisis de agua continúa en la Ciudad de México y el Estado de México, y a pesar de que las lluvias ya se hicieron presentes, no han sido suficientes para sanear los problemas a los que se enfrentan las presas del Sistema Cutzamala, mismas que están en niveles de almacenamiento bajos, comparado con los registros históricos.
Según el más reciente informe del Comité Técnico de Operación de Obras Hidráulicas de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), el almacenamiento del Sistema Cutzamala a corte del 22 de abril es del 32.4 por ciento, que es, por muy poco, más de la mitad del 64.5 por ciento histórico registrado en la misma fecha de años pasados.
Hay incluso quienes temen por la llegada de un ‘día cero’, en el que el abastecimiento de agua sea imposible para satisfacer a todas las personas del Valle de México que usan el Cutzamala, y si bien se espera que con las lluvias suba el nivel de almacenamiento, aún hay varios problemas a los que se enfrenta la recaudación de agua en el Valle de México.
La Ciudad de México y el Estado de México han sufrido las consecuencias de un sistema anticiclónico, mismo que no ha permitido la entrada de lluvias y ha contribuido a que no aumente el nivel de las presas; sin embargo ese no es su mayor problema, sino que es la infraestructura y toda el agua que se desperdicia a través de tuberías rotas.
Datos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) indican que se pierde cerca del 40 al 50 por ciento del agua en tuberías donde hay roturas o afectaciones, lo que hace que buena parte del problema de agua del Cutzamala sea debido a su infraestructura.
Jeanette Leyva, periodista de El Financiero, explicó en su columna de este martes 23 de abril que hay diversos organismos que exigen a las autoridades y a empresarios hacer compromisos financieros para atender este problema; sin embargo, significaría un importante reto económico.
¿Cuánto costaría reparar las tuberías del Sistema Cutzamala?
De acuerdo con la periodista Jeanette Leyva, se estima que son necesarios 70 mil millones de pesos para atender y renovar la infraestructura hidráulica en el Valle de México.
Esta cifra es un poco menor a lo que costó el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, que superó los 91 mil millones de pesos.
Sin embargo, parece haber una negativa de las autoridades y empresarios por ponerse a invertir en atender este tipo de problemas que afectan principalmente a la ciudadanía que depende del suministro de agua para su uso doméstico.
“Desafortunadamente, hay una postura negativa hacia la inversión privada en el sector del agua y se olvidan de la magnitud del problema, que requiere de la colaboración entre el sector público y el privado para lograr soluciones urgentes y efectivas, ya que el destino nos alcanzó”, explica Jeanette Leyva.
Una de las posibilidades sería que colaboraran gobierno y empresas, pues resolver el problema de fugas contribuiría a evitar el encarecimiento del 20 por ciento en costos a empresas que tienen concesiones.