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Conoce el ‘guajolotongo’, la evolución de la clásica ‘guajolota’ chilanga

Este nuevo invento culinario de la CDMX combina un tamal con chilaquiles. Te contamos dónde encontrarlo.

Guajolotongo, una creación chilanga que combina un tamal con chilaquiles. (Tik Tok / @soycharlygalleta)

“Este se llama guajolotongo”, dice el tamalero, y de un tirón desprende al tamal de la hoja y lo coloca en un empaque de unicel; con una cuchara lo deshace un poco, luego le avienta enormes cucharadas de chilaquiles verdes, cebollita picada, pollo deshebrado, queso y al final un chorro de crema de bolsita, “aquí bien preparado para el buen amigo que nos visita de Guadalajara”.

En un video de Tik Tok, el creador de contenido Charly Galleta, quien también tiene un podcast en Youtube llamado Realidad, compartió esta innovación gastronómica que se encontró en las calles de la Ciudad de México, “Soy de Guadalajara y en CDMX las personas son bien chidas”, dice antes de mostrar la preparación de este platillo.

Esta preparación se volvió rápidamente popular en Tik Tok, casi alcanza 170 mil likes y 2.2 millones de reproducciones; generó todo tipo de reacciones, pues no es conocida en toda la metrópoli: “Como que te faltó un bolillito para acompañar”, “Yo le llamaría tamaquiles” o “Toma todo mi dinero”.

¿La evolución de la ‘guajolota’?

El ingenio mexicano siempre tiene un nuevo antojito por ofrecer, ya desde hace tiempo la famosa “guajolota” (torta de tamal) y su complemento “guajolocombo” (torta de tamal y atole) han mantenido en movimiento a todo tipo de chilango apresurado que se nutre con la vitamina T (Tamal).

Los desayunos con demasiados carbohidratos, como la “guajolota” y el “guajolotongo”, son característicos de las metrópolis, ya que para aguantar las largas jornadas y los trayectos extenuantes se recurre a este tipo de preparaciones, capaces de espantar al hambre durante un buen rato.

Los tamales por sí mismos ya son diversos en el país, en la Ciudad de México los característicos se hacen en hoja de mazorca, hay de chile verde, mole, rajas de jalapeño con queso o dulce, aunque la variedad se ha vuelto infinita con todo tipo de ingredientes.

Ya en la década de los 80 se habían vuelto populares las tortas de tamal en la metrópoli, los vendedores se establecían a las afueras de las panaderías, para recoger el pan caliente.

Con el tiempo también nació la torta de chilaquiles, destacan las de la “Esquina del chilaquil”, entre las calles Alfonso Reyes y Tamaulipas de la colonia Hipódromo, un legendario lugar donde preparan una torta de chilaquiles original, con pechuga empanizada y frijoles.

Así, de este matrimonio de rarezas culinarias, nació el “guajolocombo”, una montaña de chilaquiles con pollo que debajo esconde a ese tamalito.

¿Dónde encontrar el ‘guajolotombo’?

El puesto de los “guajolotimbos” se encuentra de lunes a sábado, en la esquina de la calle de Holbein y Patriotismo, alcaldía Benito Juárez, Ciudad de México.

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