Las mañanas en la Ciudad de México saben a bolillo calientito y crujiente con un tamal en su interior, recién salido de la vaporera o ‘encuerado’ (frito en abundante aceite): es la famosa torta de tamal o ‘guajolota’, con la que no puede faltar un atole. Al igual que el pan dulce, su consumo en exceso podría traer consecuencias a tu salud.
Este platillo se ama o se odia, incluso en 2022 apareció entre los 50 peores platillos callejeros del mundo, un listado de Taste Atlas, especializado en gastronomía de todo el mundo, donde actualmente tiene una calificación de 3.4 estrellas.
“Es típica del Distrito Federal... Se vende por las mañanas en puestos establecidos de tamales y atoles, a la salida de las estaciones del metro, paradas de autobús, jardines, parques y sitios concurridos. Para muchos capitalinos, el día comienza con esta torta sustanciosa que se convierte en su desayuno y almuerzo”, dice el Diccionario enciclopédico de la Gastronomía Mexicana.
¿Cuántas calorías tiene una torta de tamal?
Es un contenido altamente calórico, por sí solo, un bolillo tiene 125 calorías y equivale a 3 tortillas, a ello se suman las del tamal, lo cual varía según el tipo, ingredientes, tamaño y si es frito, por ejemplo:
- Tamal de pollo: 223 calorías
- Tamal de cerdo: 190 calorías
- Tamal de carne en chile rojo: 141 calorías
- Tamal frito: 300 calorías
- Tamal de piña: 122 calorías
Una torta de tamal puede tener alrededor de de 300 a 700 calorías, según My Fitness Pal, de las cuales el 24% son carbohidratos, el 72% grasas y el 4% proteínas. Para quemar una ‘guajolota’ bien servida tendrías que correr 1.1 horas o hacer 1.7 horas de ciclismo.
¿Qué tan nutritiva es una torta de tamal?
Desventaja: muchas calorías
En esencia, una torta de tamal proporcionar un desayuno con muchos carbohidratos y calorías con el cual se mantiene la saciedad durante largas jornadas, con un consumo poco moderado fácilmente se pueden rebasar las recomendaciones de salud.
Aunque depende de la actividad física y el metabolismo de cada persona, la Organización Mundial de la Salud establece como cálculo genérico que una persona no debe exceder:
- Mujeres: 1600 a 2000 calorías al día
- Hombres: entre 2000 y 2500 al día
Las calorías no son malas por sí solas, el cuerpo las necesita para tener energía, pero ingerir más calorías de las que tu cuerpo necesita puede tener efectos como sobrepeso y otras complicaciones.
Un estudio de Science Alert dice que ingerir excesivamente calorías en un día puede causar:
- Aumento del almacenamiento de grasa
- Deterioro del control endocrino (hormonal)
- Cambios en el músculo esquelético y el tejido adiposo.
Según sus resultados, una comida en exceso no causa mucho daño a la salud, pero hacerlo repetidamente puede afectar a largo plazo con efectos como el síndrome metabólico (presión arterial alta, diabetes y obesidad).
Ventaja: fuente de nutrientes
El contenido de la guajolota es cereales: trigo y maíz. El maíz del tamal es un cereal compuesto principalmente por carbohidratos. Según Healthline aporta:
- Mucha fibra
- Proteínas
- Compuestos vegetales bioactivos benéficos para la salud
- Tiene más antioxidantes que otros cereales
Si se usa masa nixtamalizada, un proceso que ablanda los granos del maíz y hace posible que el cuerpo humano los asimile, se otorga calidad y tiene grandes beneficios nutricionales por ser rico en sustancias como almidón.
De acuerdo con Healthline, el almidón de los tamales puede ayudar a regular los niveles de azúcar y colesterol en sangre, mejorar la salud intestinal y promover la pérdida de peso.
Healthline precisa:
- Un tamal sin carne: es fuente rica en carbohidratos y grasas.
- Un tamal con carne: forma una comida completa porque aporta proteínas.
En tanto, el bolillo, al ser un pan blanco hecho con granos refinados, es relativamente más bajo en nutrientes que un pan integral: tiene muchas calorías y carbohidratos, pero pocas proteínas, grasas, fibra, vitaminas y minerales.
Desventaja: Grasas saturadas
La manteca vegetal o de cerdo es uno de los ingredientes usuales en los tamales tradicionales, sin embargo, no es la mejor opción para cocinar. Con o sin carne, el contenido de grasa de de los tamales viene principalmente de la manteca de cerdo que se añade a la masa.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, las grasas no saturadas (presentes en pescados, aguacates, frutos secos y en los aceites de girasol, soja, canola y oliva) son preferibles a las grasas saturadas (presentes en la carne grasa, la mantequilla, el aceite de palma y de coco, la nata, el queso, la mantequilla clarificada y la manteca de cerdo).
A este contenido se suman los riesgos de comer una torta con un tamal frito, lo cual aumenta muchas calorías y grasas trans.
Las grasas saturadas en exceso se han relacionado con efectos adversos sobre la salud, principalmente cardiovasculares como cardiopatías, aumento de colesterol malo en la sangre, obesidad y diabetes.